“Los obispos, además del servicio a la comunión que prestan en sus Iglesias particulares, ejercen este oficio junto con las otras iglesias diocesanas. De este modo, realizan y manifiestan el vínculo de comunión que las une entre sí.” Aparecida, 181.
“El Pueblo de Dios se construye como una comunión de Iglesias particulares, y, a través de ellas, como un intercambio entre las culturas. En este marco, los obispos y las Iglesias locales expresan su solicitud por todas las iglesias, especialmente por las más cercanas,… (182)
Estimado Sr. Obispo de
Como miembros de la Iglesia en Sucumbíos apelamos a su conciencia, como pastor de su Iglesia local y preocupado por la comunión con nuestra Iglesia local.
Desde el día 30 de octubre se vienen dando una serie de abusos contra los derechos humanos y contra la Iglesia por parte de la nueva administración:
- Desconocimiento de la existencia y el valor de la asamblea diocesana, el consejo diocesano de pastoral y la planificación pastoral.
- Con mentiras niegan los fondos económicos para cursos y talleres, manutención de misioneros y movilización para acciones pastorales.
- Se despide a las mujeres.
- Se piden visto buenos a trabajadores.
- La casa diocesana ya no es casa diocesana, sino de los Heraldos.
- No se cuenta con las comunidades para nada.
- Se impone una forma de pastoral y se “ignoran” las demás.
- La Iglesia ha perdido gran parte de la pastoral social mantenida durante décadas: Derechos Humanos, Movilidad Humana y Hogar Infantil.
- Se desconoce el plan global de la Iglesia ecuatoriana y se fomenta el sacramentalismo.
- Se envía la policía a las reuniones de los misioneros (asamblea del 7 de enero de 2011).
- No se cuenta para nada con el clero diocesano.
- Se ha cortado el financiamiento del Seminario diocesano.
- Se desconoce a los diáconos permanentes y a los ministerios instituidos.
- Se ha provocado una profunda ruptura eclesial (Donde había unidad, hay ahora desunión; donde había confianza ahora hay sospechas; donde había compartir ahora hay separación, donde había pobreza ahora hay ostentación y derroche).
Denunciamos que este conflicto eclesial, nosotros no lo teníamos antes de la llegada de la nueva Administración. Por tanto, el conflicto se ha desarrollado a partir del 30 de octubre. Es más grave aún, por que el conflicto rebasó el ámbito eclesial para transformarse un problema social y político, poniendo en grave situación a las personas dadas las características sensibles de la zona.
El Gobierno, la Asamblea Nacional, la Universidad Andina, los alcaldes de la provincia han condecorado y reconocido la labor de Mons. Gonzalo López, nuestro Vicario Apostólico que con dolor enorme firma “obispo en el exilio”. Y la Conferencia Episcopal no ha dicho nada públicamente de su hermano en el episcopado, el que acompañó durante 40 años a sus hermanos obispos.
Le recordamos nuestro esfuerzo por hacer las cosas fraternalmente como miembros de la Iglesia. En enero pasado enviamos a Usted la información completa de nuestros encuentros y reuniones diocesanas. Algunas iniciativas propiciadas por la Conferencia en atención al conflicto, hemos visto diluirse sin llegar responsablemente a solucionar la situación. Esto nos preocupa gravemente porque lo que hace es dilatar todo esto, con la gran desgracia inmediata de aumentar la división y ruptura. Nos preocupa profundamente el silencio que como conjunto la Conferencia Episcopal Ecuatoriana ha tenido frente a la situación de Sucumbíos y en particular ante la abierta tendencia de algunos grupos en contra del evangelio. ¿Todo esto que le dice a Usted?
Usted se va a reunir próximamente en Asamblea General. Van a tratar los temas candentes de la Iglesia en Ecuador: ¿Estará el Vicariato de Sucumbíos en su agenda? ¿Van a decirnos algo?
LA ASAMBLEA DIOCESANA DE LOS AGENTES DE PASTORAL Y MINISTERIOS DE LA IGLESIA DE SUCUMBÍOS EN VIGILIA PERMANENTE DESDE EL 07 DE ENERO DE 2011
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