El diario granadino EL CORREO (1913-1934), fué fundado por quien fuera su Director, Carlos Rocha Avellán y es sobre todo recordado por haber dado acogida a las publicaciones literarias del Movimiento de Vanguardia, "Rincón de Vanguardia" y "Página de Vanguardia", a cargo de Pablo Antonio Cuadra Cardenal y Octavio Rocha Bustamante, hijo éste último de don Carlos y padre de Luis Rocha Urtecho, quien, junto con su nieto Luis Javier Espinoza Rocha, retoman hoy "El Correo Nicaragüense"; un blog pluralista, que agradece la reproducción de su contenido.

domingo, 28 de agosto de 2016

INVITACIÓN A LA LIBERTAD

INVITACIÓN A LA LIBERTAD








De la libertad cervantina a la libertad real, sólo se interpone la Mancha, pues dice don Ramón Menéndez Pidal, refiriéndose a "Don Quijote": "No hay ficción novelesca que como ésta se haya convertido en realidad humana universal".

El Instituto Nicaragüense de Cultura Hispánica (INCH), en el contexto de la Jornada Cervantina "Cervantes: la tristeza inmortal de ser divino" (verso final de "Un soneto a Cervantes" de Rubén Darío), invita a la charla

"Cervantes y la libertad"

a cargo del escritor:                Luis Rocha Urtecho

En la sede del INCH en residencial "Las Colinas" el miércoles 31 de agosto del corriente año, a las seis y media de la tarde.

Al escuchar esta charla usted comprobará que no queda otro camino que encontrar la libertad, porque en aquel tiempo "No sonaba en los aires la querella del mísero cautivo, cuando alzaba la voz a maldecir su estrella; entonces libertad dulce reinaba y el nombre odioso de la servidumbre en ningunos oídos resonaba."



FIESTA DE LOS NIÑOS QUE SON Y DE QUIENES SOMOS COMO NIÑOS

Se avecina en septiembre una gran fiesta de cuentos para los niños que son niños en la actualidad, y que más adelante, en su madurez, tendrán el privilegio de seguir siéndolo. Un carnaval intemporal que lo inspira dos libros de cuentos infantiles, de dos reconocidos escritores nicaragüenses que nunca antes habían desarrollado su talento en este género: LA MONA PANCHITA de Vidaluz Meneses y EL COFRE DE LOS SUEÑOS de Luis Rocha. Algo que no se pueden perder los niños, los padres y abuelos de los niños, ni colegios, ni alumnos y sus profesores.

LA MONA PANCHITA: 3 DE SEPTIEMBRE

LA MONA PANCHITA es el pequeño libro póstumo, de un solo pero maravilloso cuento, de Vidaluz Meneses, algo así como quien después de cumplir su misión en la vida, regresa a sus inicios: una infancia llena de luz, la de Vidaluz hoy. Que la infancia es el tesoro de todas las edades, lo demuestra  Vidaluz con este cuento dedicado a sus nietos como si fuesen  los niños del mundo en cuyos espíritus alcanzamos con holgura,  al igual que en esos niños, por más que evolucionen, ha cabido la ternura de mujer, madre y abuela de Vidaluz. Esta realización de un nuevo mundo como escritora, logró verlo Vidaluz, al menos digitalmente durante los apremiantes preparativos de edición, en su lecho de enferma poco antes de partir hacia ese nuevo mundo donde con seguridad tiene un animado diálogo con más niños y contadores de cuentos. Simplemente porque los niños son inmortales, y porque la imaginación es una infancia eterna.

¿Pero, de qué trata este cuento?  El propósito de HISPAMER, como editora, de inculcar el amor por la naturaleza y la libertad de los animales, aquí se hace realidad. La mona Panchita, al rescatar esa infancia que todos llevamos en lo profundo del alma, también recupera valores que de otra manera, como las especies, corren peligro de extinción. De eso se trata este relato, que es como un Arca de Noé al mando de San Francisco de Asís.

 Valeria Zelaya Lacayo, la generosa ilustradora, y Vidaluz Meneses, autora del cuento, hicieron aquí una alianza de solidaridad y alegría, para traducirnos el lenguaje –enriquecido por situaciones dramáticas y hasta jocosas-, que se habla entre todos los seres –ya sean animales o humanos- que logramos entendernos gracias a un sentimiento de respeto y afecto mutuo. Ese sentimiento inagotable y valiente que prodiga Vidaluz a su alrededor.

La mona Panchita estará en CUENTA CUENTOS, en el auditorio Pablo Antonio Cuadra de HISPAMER, el sábado 3 de septiembre, a las once del día. Previamente don Jesús de Santiago dirá algunas palabras al momento de entregar un ejemplar a una de las hijas de Vidaluz, quien simbólicamente lo recibirá a nombre de su madre, sus hermanos  y de toda su familia. Luis Rocha tendrá una brevísima intervención, y entregará su ejemplar a la Ilustradora Valeria Zelaya Lacayo. Este acto tendrá el carácter de ser un merecido homenaje a la gran mujer que se hizo  niña para vivir y escribir La mona Panchita: Vidaluz Meneses.


MASATEPE: 9 DE SEPTIEMBRE

El viernes 9 de septiembre, en la FUNDACIÓN LUISA MERCADO ,en Masatepe, a las cuatro de la tarde, se presentará, como un adelanto nacional,para que se sepa que por la víspera se conocerá el día, el libro de cuentos para niños, EL COFRE DE LOS SUEÑOS de Luis Rocha. La hora y el día se escogió para que puedan asistir colegios que lo deseen, al igual que profesores y parientes de los niños que asistan, y  pueblo masatepino en general.

 Este libro nos presenta pequeños episodios relacionados desde el inicio hasta el final, que son las aventuras de dos niños en busca de su identidad. Ese día es también para aprovechar la presencia  en Nicaragua del joven hispanista alemán Christian Hopp, quien disertará sobre este libro, con un texto especialmente elaborado para la comprensión y disfrute de niños y adultos.  Luis Rocha  leerá parte de sus cuentos y comentará otros: una lectura comentada y amena dirigida a los amantes de este género. El acto está estrictamente calculado para no exceder una hora, en consideración a quienes viven lejos. HISPAMER montará una feria de libros para los asistentes.

 Para la contraportada de EL COFRE DE LOS SUEÑOS, Christian Hopp escribió: “Con EL COFRE DE LOS SUEÑOS, Luis Rocha nos regala un cofre de maravillas, que encantará a todo lector, sea un niño o uno que no ha dejado de serlo. La jornada de Yo no sabo, quien busca un nombre propio, es una reivindicación genial de los sueños, de la imaginación y del pensamiento mítico anterior a la lógica. Este gran libro pequeño es un baluarte del anti dogmatismo y un homenaje a quienes lo han vivido y vivirán, y a todos los seres que pueblan, como don Quijote, lo real y maravilloso del mundo.”


EL COFRE DE LOS SUEÑOS: 10 DE SEPTIEMBRE

EL COFRE DE LOS SUEÑOS de Luis Rocha, tendrá su presentación oficial el sábado 10 de septiembre, en CUENTA CUENTOS, en el auditorio Pablo Antonio Cuadra de HISPAMER a las once del día. Todos los niños del mundo están invitados a escuchar CUENTA CUENTOS. Don Jesús de Santiago hará la presentación y Luis Rocha la entrega de su ejemplar al ilustrador,  el pintor Tito Chamorro. Sobre este libro el conocido artista plástico y sacerdote claretiano, Maximino Cerezo Barredo (MINO), le escribió a Luis Rocha:

“Recién terminé de leer de un tirón aunque no sin parpadear muchas veces de admiración y alegría EL COFRE DE LOS SUEÑOS. Antes de abrir tu Cofre me preguntaba si serías, Luis, tan buen contador de cuentos como poeta. No me has defraudado. Al contrario. La mejor prueba de que has conseguido crear algo hermoso es que al concluir la lectura surgen, como esas orquídeas de El abuelo de todos los árboles, añorados recuerdos de la infancia, que parecían olvidados, pero no.

Que muchos niños y niñas abran tu Cofre, y que muchos que por fuera no lo somos no temamos hacernos niños y soñar.”

ENTREVISTA | ALMA GUILLERMOPRIETO

“El periodismo hoy se parece al burrito triste de ‘Winnie the Pooh’”

Acaba de aparecer uno de los libros recopilatorios de la escritora, 'Los placeres y los días', donde recopila “aquello que me dio más placer escribir”


Dijo aquí Alma Guillermoprieto, una de las mejores reporteras del mundo, que el oficio al que había dedicado sus esfuerzos desde que quiso cubrir la revolución de Nicaragua, en 1977, se estaba acabando… Lo estaban matando, decía entonces, “el sentimentalismo, la condescendencia, la pobretería”. Como el cadáver del famoso poema de César Vallejo, ese oficio nuestro ha seguido muriendo, pero sigue teniendo a bordo a esta mujer que nació en México en 1949, forma parte de la Fundación para el Nuevo periodismo fundada por García Márquez, ha escrito o escribe para The Washington Post y para New Yorker y ha recogido en libros fundamentales del periodismo contemporáneo algunos de sus más célebres trabajos.
Ahora acaba de aparecer uno de esos libros recopilatorios de Alma Guillermoprieto, Los placeres y los días (Almadia, México), donde recopila “aquello que me dio más placer escribir”. Ahí están el grupo cubano Buenavista Social Club, Celia Cruz o las luchadoras cholitas de Bolivia. En este momento está trabajando sobre “el inminente acuerdo de paz entre las FARC y el Gobierno colombianos, que a tantos nos tiene contentos”.
Pregunta. ¿Por qué?
Respuesta. ¡Las FARC llevan 52 años peleando una guerra que nunca tuvieron posibilidades de ganar! Hasta una pesimista crónica como yo piensa que es mejor un país sin guerra que un país con guerra. Las tareas pendientes de la posguerra –el desminado de las zonas rurales, la justicia para las víctimas, la repartición de tierras, la reintegración de los combatientes a la vida civil—determinarán si la paz dura o no… Y, claro, falta la otra paz, con el Ejército de Liberación Nacional, que está muy en veremos todavía.
A Alma Guillermoprieto le parece que ahora hay mejor tiempo para la zona. “Estoy contenta”, dice, “porque pude ir a La Habana para cubrir la visita de Barack Obama. Entre la normalización de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba (¿hasta cuándo se podía mantener esa reliquia estúpida de la guerra fría?) y el fin de la guerra en Colombia, siento que está terminando toda una época que marcó mi vida y mi trabajo. Será un alivio voltear a ver otras cosas”.
Pero no es tan buen tiempo para el oficio, como advertía hace siete años en este mismo periódico. Para ella, el periodismo hoy se parece al burrito de Winnie the Pooh. “Ese burro de peluche está deprimido siempre y siempre piensa que lo peor es lo que va a ocurrir y que nada bueno va a pasar. Y yo pienso que el periodismo, ahora, se parece a ese burrito Igor, que anda permanentemente triste por la vida”.
¿Y qué le ha pasado al burrito? “Que no lo quieren, que nadie lo quiere. Mira lo que pasa en la campaña electoral en los Estados Unidos: lo que les fascina a Trump y a los suyos es tirarle piedras al periodismo, y eso se gana, en sus filas, un aplauso enorme. Creo que pasa también en América Latina y que en España lo que sucede no es diferente”.
“¿Qué he hecho yo para merecer esto?”, se hace Alma Guillermoprieto la pregunta de Almodóvar. “Yo siempre pienso que ellos viven en el error y que yo soy una santa… Pero no, no somos santos. De pronto hemos hecho mal en no acompañar a la gente en sus verdaderas preocupaciones. Somos finalmente una minoría, parte de una élite, aunque muchos periodistas provengamos de las clases populares. Pero ya de hecho somos una élite y nos ocupamos de las cosas que les preocupan a las clases liberales. Una de las cosas que descubrí en la revolución es que a la mayoría de la gente no le interesa la revolución. Lo que quieren es vivir en paz y a nosotros los periodistas nos interesan las revoluciones. Así que yo creo que ahí hay ese desfase entre los periodistas y la gente.
Para ella, Internet tiene que ver con esa borrasca. “Ha hecho estragos. Ha roto la plaza pública de las opiniones diferentes, y ha hecho que acudan a esa plaza multitudes que buscan a quienes opinan lo mismo que ellos. Para alguien que estudia en Texas sobre el arte renacentista en Ravenna, Internet es una bendición, porque tiene accesos a los archivos de aquella universidad italiana. Y para el periodismo ha sido una bendición también, porque podemos mandar nuestras crónicas de inmediato, y salen como las enviamos. Y, además, ha sido una bendición para el periodismo porque las investigaciones previas las podemos hacer a gran profundidad. Pero también ha traído grandes castigos. Uno de ellos es que la gente ya no tiene que acudir a mí para recibir información, puede acudir al vecino que estaba en el lugar de los hechos. Mira lo que pasó con el Chapo: lo que se vio fue el famoso videíto que alguien tomó con su teléfono. Eso está ahí y eso vale mucho más que una profunda investigación sobre los antecedentes del Chapo”.
P. ¿Y entonces cuál es nuestro papel?
R. Yo sigo pensando que nuestro papel es ser el espacio donde la gente recibe la información necesaria para entender. Ese es nuestro papel: el espacio donde la gente puede sentarse a reflexionar, el lugar donde nosotros ayudamos a la reflexión con información que no se percibe sólo con una imagen.
Internet ha llenado el mundo de opiniones, dichas a bote pronto. “Y de información chueca [falsa], las dos cosas. Cualquier opinión basada en una información de esas características es buena si a mí me conviene, si está de acuerdo con lo que yo pienso… No hay más que ver los comentarios que se publican después de los análisis o reportajes: odio y rabia que se canalizan como si fueran, también, opiniones. No quiero parecer santona, pero ahí se produce lo peor de Internet, el odio y la rabia. Pero, ojo, hay mucho periodismo en Internet que es excelente”.
P. El periodista ahora es multimedia. ¿Cuál es su definición del periodista hoy?
R. Hay muchos periodistas. Yo suelo hablar del periodista que quisiera ser: equitativa, que trata de seguir una cierta orientación moral en cuanto a lo que quiere reportear… En fin, que quisiera estar llena de virtudes. Pero, qué va, también manipulo, por mucho que trate de no hacerlo. Vi debates entre republicanos norteamericanos durante la campaña para elegir a Trump y la manipulación era atroz, los ataques a los candidatos demócratas eran desvergonzados… ¿Los periodistas que los seguían eran de veras objetivos, no estaban siendo manipulados? Los procesos de Internet hacen que esté ausente la edición que ayuda a moderarte un poco. Creo que al periodismo lo que le falta es el proceso de edición. Los editores son la gran ausencia en Internet, porque ellos obligan a no potenciar nuestro lado débil, el que se acomoda a lo que oye. La figura del editor es la gran pérdida de Internet.
P. Y cuando interviene el editor y señala que una información no se puede dar aparece la acusación de censura…
R. ¡Claro! Y la censura es una cosa muy diferente. La censura es no permitir los datos no corroborados, no permitir la propagación del odio, del racismo… Escribes lo que sabes y corroboras… El editor que cumple ese papel es un moderador. Hay quienes equiparan editar a censurar. Y yo estoy muy feliz con mis editores, que quieren mejorar lo que yo haga. Una parte del desprestigio del periodismo en América Latina es que nunca hubo editores de renglón, como se los llama, editores que verdaderamente revisen cada renglón de un texto.

La libertad: condición esencial del ser humano

Alejandro Serrano Caldera

En Nicaragua se vive actualmente un momento difícil y confuso. Difícil, en tanto se están produciendo una serie de acciones provenientes del poder, las que progresivamente van cerrando los espacios de ejercicio de la libertad política y social. Confuso, en cuanto no existe una razón clara que explique por qué el cambio de estrategias y tácticas utilizadas, mediante las cuales se han venido manipulando la ley y las instituciones, para dar una apariencia de legalidad a los objetivos alcanzados

Este cambio ha producido una reacción interna y externa y, en consecuencia, ha generado críticas para el Gobierno y dificultades adicionales que antes no tenía, al menos en la forma en que están presentándose actualmente.
En los sectores políticos, sociales y económicos del país se preguntan ¿por qué crearse estos problemas?, ¿por qué oponerse a la observación internacional que podría dar legitimidad al proceso electoral y al resultado de las elecciones?, ¿por qué eliminar prácticamente a la oposición la que, según las encuestas y las estimaciones hechas, no tenía posibilidad ante la ventaja considerable que sobre ella presenta el FSLN?, ¿por qué instalar una aparente “oposición” cuya credibilidad está muy debilitada?, ¿por qué destituir a 28 diputados de la oposición real, entre propietarios y suplentes, siendo que estos eran los que podían dar una impresión de democracia en el parlamento sin tener ninguna posibilidad de hacer prevalecer sus puntos de vista, pues el gobierno tiene en la Asamblea una mayoría superior a los dos tercios?
Estas preguntas aparecen reiteradamente en esas y muchas otras situaciones semejantes, y aunque persista la duda sobre la respuesta apropiada para cada caso específico, del contexto general que resulta de las actitudes del poder político se desprende la idea de que de unos cuantos meses a esta parte se ha producido un cambio en la forma de ejercicio del poder y un nuevo cuadro y paradigma político se ha hecho presente y sustituye al que hasta hace poco tiempo constituía la realidad política nicaragüense.
Pareciera que hay una voluntad de mayor concentración de poder y de un ejercicio más autoritario y absoluto, en cuya práctica va explícito, o implícito, el mensaje a toda la ciudadanía, principalmente a aquel sector de la misma que se opone a la forma y fondo de ejercicio del poder.
Todo esto redunda en un cierre de los espacios políticos y en una restricción de la práctica de la libertad, lo que constituye una transgresión o al menos una amenaza inminente a este derecho humano fundamental, sin el cual no es posible ni la democracia ni el Estado de Derecho.
No hay que olvidar que la libertad es un elemento constitutivo del ser humano, sujeto y destinatario de la misma, como persona integrante de una colectividad determinada. Por ello, la lucha por la libertad es ya en sí, y aún antes de su resultado, un acto libre. El carácter histórico y el carácter consciente son pues elementos esenciales de la libertad.
Es permanente en su ejercicio la voluntad de adecuación del medio a las necesidades del ser humano, la transformación de los elementos y de la sociedad en la historia, y el esfuerzo colectivo por forjar una comunidad libre y creativa, en la cual encuentra su plenitud la persona.
El sujeto individual es libre, cuando la comunidad a la que pertenece también lo es. La libertad individual necesita la libertad colectiva y solo puede plenamente reafirmarse en un pueblo libre y en una nación libre.
Estas reflexiones, sin embargo, no deben llevarnos a concluir en un condicionamiento de la libertad individual a la libertad colectiva. No existe la libertad en su consideración esencial, si esta no puede referirse a la persona individual. Al hablar de su historicidad y de ciertos aspectos de su naturaleza social, no se deben diluir las libertades fundamentales, tradicionalmente reconocidas como inherentes a la persona, en ningún tipo de conveniencias ideológicas o de oportunidades políticas.
Más allá de lo histórico y convencional que amolda y perfila el ejercicio de la libertad en el medio social, existen condiciones esenciales inherentes al ser humano, las que han sido reafirmadas en el largo y difícil accionar por los caminos de la historia.
La idea de la libertad ha sido uno de los grandes temas de la filosofía y la política. Para Kant la libertad es un tejido de posibilidades y límites entre los que discurre la actividad individual, de manera tal que pueda formularse una ley universal para “la libertad de todos sin interferir con la libertad de cada uno”.
Para Rousseau la libertad individual es fruto del contrato social, mediante el cual se transforma la libertad natural en la libertad civil que nace del acuerdo de voluntades.
Para Hegel la libertad se encuentra en la estructura del Estado, en la ley que establece los espacios en que puede ejercerse y las fronteras que fijan los límites a su acción. “La libertad es la conciencia de la necesidad”, dice. Esto significa la conciencia de los límites establecidos en la ley que señala hasta donde se puede actuar libremente sin transgredirla.
El sentido filosófico y político moderno de la libertad parte, entre otras cosas, de considerar a la persona frente al Estado y de atribuir un origen racional y natural a las libertades fundamentales contenidas en la Declaración de Derechos del Hombre. Al ser la razón una condición natural del género humano, los privilegios y diferencias entre las personas fueron abolidos, al menos teóricamente, y se proclamó la igualdad y la libertad como elementos esenciales al sujeto y como divisa política y bandera de lucha.
La libertad es pues una condición inherente al ser humano. El respeto a la misma es una obligación ineludible del poder para justificarse y existir con legitimidad. La violación de este derecho humano fundamental le hace perder toda justificación de ser y actuar.
Cuando el poder actúa violando estos valores y principios o bien manipulando su aplicación, pierde toda legitimidad y razón de ser. Esto ocurre también cuando pretende que tiene la solución y solo le faltan los problemas que el mismo crea; cuando de antemano tiene las respuestas y solo le faltan las preguntas; cuando tiene los resultados previamente preparados y solo le faltan las elecciones.
El respeto a la libertad es imprescindible a la vida individual y colectiva y cualquier transgresión justifica su defensa que es la defensa de la condición humana y de los valores fundamentales de la sociedad, la política y la democracia.
El autor es jurista y filósofo nicaragüense.

martes, 16 de agosto de 2016

HIPÓCRATES, AL FILO DE LA NAVAJA

HIPÓCRATES, AL FILO DE LA NAVAJA

Recientemente publiqué en estas mismas páginas mi artículo “José María Valverde: la ética que no cesa”, memorable lección histórica de un insigne profesor, ensayista, traductor y poeta, José María Valverde, que llevó a la práctica de la docencia su convicción de que sin ética, no hay estética, y renunció a su cátedra de esta materia. Hoy, una serie de acontecimientos que involucran al campo médico, ponen sobre el tapete el tema de la ética, cuando un sector médico considera que su objetivo principal es hacer causa común con aquella persona o personas, que en el ejercicio de su profesión, hacen mala práctica médica, y el paciente acaba siendo la víctima.

Los ejemplos ya rebasan el vaso y la tolerancia. La solidaridad, es por lo tanto, para este sector de profesionales, con el “colega” y no con el paciente, que vivo o muerto, merece aún mayor fraternidad  y respeto. El gremio médico  no debiera de estar presto en apañar los errores de estos sus “colegas”, criticar al sistema judicial cuando actúa con ecuanimidad, sino en reflexionar públicamente, condenar lo malo, y seguir los lineamientos hipocráticos.

La mala práctica médica no es exclusiva de quirófanos o de malos diagnósticos, sino que abarca el campo moral cuando, por ejemplo, médicos santurrones en sus clínicas u hospitales de lujo, en sus casas maltratan a sus esposas, las acosan, chantajean el mantenimiento, al que están obligados por la ley, de sus hijos, les hacen sentir en toda su magnitud un desquiciado machismo, locura muy personal que pretenden trasmitir impunemente a la mujer humillada y desesperada. La peste de su propia locura y frustración, pulcramente trasmitida. Y eso tampoco se puede tolerar, pues es tan criminal como ejercer sin conocimiento de lo que es un ser humano. 

A la ética recurre Hipócrates en su famoso juramento. La ética es sinónimo de moral, y según José Hierro S. Pescador: “En primer lugar, moral se opone a inmoral, y en este sentido es término típicamente valorativo: una norma o una conducta inmoral es una norma o una conducta rechazable…” Y creo que la ética está ausente en quienes no son capaces de ejercer la medicina, desde sus casas, hasta clínicas humildes. La clínica no importa, es la moral. La vocación de servicio con conocimiento y hasta con desprendimiento económico.

En mi vida he tenido la dicha de contar entre mis mejores amigos, a médicos, de gran calidad humana, y sólo mencionaré a los que recuerdo de cuantos se han ido:  Edmundo Mendieta, autor, junto con su hijo Walter, de la “Historia de la Ginecología y Obstetricia en Nicaragua”; Roberto Calderón, el mago; René Sandino Arguello, erudito en tangos; Cesar Amador Kühl, mecenas de la música; Luis Favilli, escritor; Cesar Zepeda Monterrey y Wilfredo Alvarez, pintores,  poetas y músicos;  Clemente Guido, novelista, gran ajedrecista y  especialista en artes marciales; Juan Ignacio Gutiérrez Sacasa, primer Director del Hospital Militar; y Sergio Martínez Ordoñez, el de a diario, que transpiraba amenidad, humor y no era quien imponía sus conocimientos a sus alumnos, sino que los compartía con ellos. Y tengo y guardo en mi corazón a los que  me quedan, porque debo decirlo, quiero muchísimo a los médicos. A los verdaderos médicos.

La importancia de Hipócrates, autor de muchos tratados de medicina en su época, es que rechaza la superstición y funda una ética y una moral explicitas en su famoso  “Juramento”, en cuyos párrafos finales se encuentra la clave del ser o no ser médico verdaderamente ético y digno: “Ahora, si cumplo este juramento y no lo quebranto, que los frutos de la vida y el arte sean míos, que sea siempre honrado por todos los hombres y que lo contrario me ocurra si lo quebranto y soy perjuro.”





LUIS ROCHA




“Extremadura”, Masatepe, 15/08/16.

martes, 2 de agosto de 2016

Fallece Teófilo Cabestrero, teólogo de la liberación y escritor claretiano

Murió en Guatemala, a los 85 años, con una obra teológico-pastoral ingente


(José María Vigil).- Descansa ya en paz Teófilo, concluyendo una aventura misionera de largo recorrido, que comenzó en la Congregación Mariana de jóvenes en la comunidad claretiana de Calatayud (Zaragoza, España) en los años 50, y pasó por una innumerable sucesión de trabajos al servicio misionero de la palabra.
El Hogar Claretiano en sus tiempos de formación; la primera hoja auxiliar de la liturgia dominical en la España posconciliar luego; los libros pastorales sobre cada uno de los diferentes tiempos litúrgicos; la cobertura periodística de la Conferencia de Puebla en la revista Vida Nueva.
La revista Misión Abierta (la antigua Ilustración del Clero transformada radicalmente); la presentación pública de los primeros pasos de la Misión Claretiana de Mato Grosso con Casaldáliga; su participación en el primer equipo misionero que abrió la Misión paraguaya de Yhú de la provincia de Aragón.
El acompañamiento a la Revolución Nicaragüense con la revista Amanecer y el Centro Valdivieso; el Taller de Materiales para la Evangelización en Colón y Panamá, la etapa de acompañamiento al noviciado y a la parroquia de Guatemala, con su constante publicación intermintente de libros...
Y muchos otros servicios misioneros de la palabra cuyo elenco ni entre todos nosotros podríamos completar; sólo Dios lo conoce.
Descansa ya en paz Teófilo y nos precede en nuestro común camino por el servicio misionero de la palabra.
Breve biografía
El más pequeño de los cinco hijos del matrimonio formado por Marciano Cabestrero y María Paz Rodríguez, nació en Calatayud en 1931. Su familia procedía de Castrillo de Duero, municipio de la provincia de Valladolid. Estudió Bachillerato y Comercio en su ciudad natal y a los 18 años comenzó a trabajar en las oficinas de la fábricas de harinas de Arturo Mediano.
Miembro de la Congregación Mariana, que por entonces dirigía el padre Zubiri, claretiano, decide, al igual que otros muchos jóvenes bilbilitanos en aquella época, profesar en la orden religiosa de su mentor. Estudió en el noviciado de Vic(Barcelona), para cursar posteriormente Filosofía, en el seminario de Solsona (Lérida), y Teología, en Valls (Tarragona). Trasladado a Roma, se doctora en Teología por la Universidad Pontificia Leteranense, y estudia Medios de Comunicación Social en la Pro Deo, para especializarse posteriormente en Pastoral y Catequesis en el Instituto Lumen Vitae de Bruselas.
De regreso a España trabaja simultáneamente en Madrid y Salamanca, hasta el año 1979, en que se traslada a América Latina como misionero. Cabestrero, que fue director de la revista Hogar Claretiano en sus años de estudiante en Valls, es nombrado redactor jefe de Iris durante la época en que dicha revista es dirigida por el obispo Casaldáliga, su compañero y amigo. Profesor del Teologado Claretiano en Salamanca, visitó por entonces diversos países europeos.
En 1972 funda la revista Misión Abierta, de la que fue director hasta su marcha a tierras americanas. Corresponsal de Vida Nueva, cubrió los viajes de Juan Pablo II a México, Brasil y Centroamérica. En Paraguay fundó, con otros compañeros, la Misión Claretiana de Aragón (1979-80).
En Nicaragua (1980-83) dirige el departamento de publicaciones del Centro Ecuménico Antonio Valdivieso, y fue miembro fundador del semanario El Tacayán. Desde 1983, vive y trabaja en Panamá. Pertenece al equipo de la Misión Claretiana en Colón y Kuna Yala (indios kuna).

lunes, 1 de agosto de 2016

JOSE MARÍA VALVERDE: LA ÉTICA QUE NO CESA

El propio 6 de junio de este año 2016, recibí un correo de Juan Valverde Gefaell, recordándome que se cumplían 20 años del fallecimiento, en 1996, de su padre, el poeta José María Valverde, quien había nacido en 1926. Ya lo tenía anotado para escribir este artículo en su memoria, pero circunstancias insignificantes de salud, me impidieron hacerlo, aunque no dejar de recordar a este primogénito hijo suyo, cuando junto a sus padres y hermanos, los conocí en 1971 residiendo en Canadá, pues José María ejercía docencia, investigación y traducción en la Universidad de Trent. Desde entonces, y aún antes, cuando nos relacionaron epistolarmente José Coronel Urtecho y Pablo Antonio Cuadra, tuve una desproporcionada amistad con este entrañable ser, inalcanzable para mí, por “mínimo y dulce”, como dijo Rubén Darío de Francisco de Asís.

Un escritor gigante en conocimientos, erudito sin ostentación alguna, y ejemplar en ética, valentía, generosidad y humildad. De lo mejor que ha parido España, por las permanentes “Enseñanzas de la edad” que es su vida hecha poesía y moral, como lo es su legado de traducciones, ensayos, su enciclopédica Historia de la Literatura Universal, y su solidaridad sin fronteras con las causas de los pobres y oprimidos. Al hacer esta consciente apología de su personalidad, estoy pensando en dos poetas, uno español, y el otro nicaragüense, que en mucho sus vidas cortas pero intensas, se identifican con la de José María. Me refiero a Miguel Hernández, quien de seguro habría calificado la ética intrínseca en su persona, como rayo que no cesa, y a Leonel Rugama, quien lo hubiese incorporado a su poema, diciéndole: Ahora vamos a vivir como los santos.

Y como los santos vivió su vida, sin escatimar en problemas políticos o económicos, siempre apoyado en ese pilar a toda prueba que fue su esposa Pilar Gefaell. Ya en 1955 es catedrático de Estética en la Universidad de Barcelona, y diez años después, en 1965 sus amigos y colegas Enrique Tierno Galván, José Luis Aranguren y Agustín García Calvo, son expulsados de la Universidad por las autoridades franquistas. José María Valverde se solidariza con ellos y renuncia a su cátedra de Estética. Célebre es la frase que escribió, en latín, en el pizarrón del  aula en que impartía clases: Nulla aesthetica sine ethica, ergo apága y vámonos.

“No hay Estética sin Ética”. Él no podía convivir con una situación que enterraba las enseñanzas morales de sus mejores exponentes. Su solidaridad fue, no únicamente con Tierno Galván, Aranguren y García Calvo, sino sobre todo con la justicia que no se puede traicionar, y con su Dios: Ese Cristo que siempre llevó dentro de sí a todas partes donde fue, y trajo a esta su amada Nicaragua cuando vino en 1982, y desbordado de alegría como lo estábamos muchos, en un poema que como carta me dirige, escribe: El filo de la historia hoy cruza Nicaragua. / Si hay milagros como éstos, otros pueden seguir.

Junto con José María Valverde, yo creo en los milagros. Nuestra equivocación estuvo en que sentimos que aquella revolución, era un milagro realizado, y no nos percatamos que está por venir. Dentro del campo de la Ética, un solo ejemplo, muy simple por sucontradicción de valores morales, nos lo dan universidades en donde hay catedráticos que imparten Derecho Constitucional, mientras desde sus partidos acatan las directrices para violar la ya muy maltrecha Constitución.

Y que no hay Estética sin Ética, es la verdad que nos dejó José María, que también significa que no puede existir, como país, aquel que no la practique en todas sus instancias.


LUIS ROCHA



“Extremadura”, Masatepe, 02/08/ 16.