Canciller brasileño pide ante la ONU que se demuestre voluntad de diálogo con Irán
El canciller brasileño, Celso Amorim, afirmó este jueves en la 65º Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que el Gobierno iraní mantiene una "actitud de flexibilidad y apertura" hacia la negociación, pero "es necesario que todas las partes demuestren la misma voluntad".
"El mundo no puede correr el riesgo de un nuevo conflicto como el de Irak (...) A pesar de las sanciones esperamos que la lógica del diálogo y la comprensión prevalecerán", dijo Amorim durante su discurso en el debate anual de la Asamblea general de la ONU.
Estamos convencidos, dijo, que con la vuelta a la mesa de negociaciones con Teherán, las partes encontrarán soluciones, tales como lo que se refiere a enriquecimiento del 20 por ciento sobre las reservas del uranio enriquecido acumulado desde octubre de 2009.
Las cuatro naciones que integran el grupo BRIC, Brasil, Rusia, India y China, señalaron este miércoles que analizarán una moción contraria a las sanciones unilaterales impuestas por occidente a Irán, por su enriquecimiento de uranio con fines pacíficos para presentarla ante Naciones Unidas.
La información la dio a conocer Amorim horas antes de la Asamblea General de la ONU. Expresó que "la idea de sanciones unilaterales e injerencia, sobre todo en asuntos que están siendo tratados por el Consejo de Seguridad, no es una idea que nos agrada".
"A Brasil no le parecen oportunas las sanciones contra Irán, pero las acató porque son sanciones multilaterales, tienen una base legal", insistió Amorim, en referencia a las sanciones aprobadas el pasado mes de junio por el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
El titular de la cartera de Asuntos Exteriores de Brasil dijo que la decisión de presentar una resolución a favor de la República Islámica "es una sugerencia de Rusia, son varias resoluciones (a debate), esta es una de ellas".
Amorim se reunió durante unos treinta minutos con el presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, al margen de la Cumbre de los Objetivos del Milenio en Naciones Unidas.
"El presidente iraní aprecia nuestra sinceridad, nuestros deseos de trabajar por la paz", expresó el canciller brasileño.
Irán enfrenta seis resoluciones de Naciones Unidas. El pasado mes junio, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la imposición de una cuarta ronda de sanciones contra la República Islámica por el desarrollo de su programa nuclear.
Tanto Brasil como Turquía se opusieron a las sanciones y consideraron que se debe dar más tiempo a la diplomacia, después del acuerdo que alcanzaron el pasado mes de mayo con Irán, en el que Teherán aceptó enviar mil 200 kilogramos de su uranio a Ankara a cambio de 120 kilos de uranio enriquecido.
Por su parte, Estados Unidos, impuso nuevas sanciones unilaterales contra los bancos y compañías energéticas que negocien con Irán, por su industria nuclear, a la que Washignton considera una "amenaza".
El gobierno de Teherán ha insistido en que su industria nuclear está dedicada a fines pacíficos, mientras que EE.UU., autor de las bombas atómicas lanzadas sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, condena los avances de Irán en materia nuclear.
teleSUR-AFP-EFE/kg - FC
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