Manifiesto día Internacional de la Mujer Trabajadora

Como cada 8 de marzo conmemoramos el DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER TRABAJADORA en este día se recuerdan las luchas de cientos de mujeres que han dejado sus vidas por la conquista de sus derechos labores, pero sobre todo por el reconocimiento y el respeto dentro de sus respectivas sociedades.

Este año se celebra el centenario del comienzo de la conmemoración del DIA INTERNACIONAL DE LA MUJER TRABAJADORA, del comienzo de su lucha para participar en todos los ámbitos de la sociedad en plena igualdad con los hombres.

Desde entonces, se han logrado avances significativos en la igualdad de mujeres y hombres en nuestra sociedad; pero seguimos manteniendo importantes desigualdades y todavía queda un largo camino por recorrer. En este sentido, declaramos:

PRIMERO.- Nos comprometemos en mejorar y apoyar activamente el acceso de las mujeres a la participación y a la toma de decisiones en los ámbitos sociocultural, político, económico, etc.

SEGUNDO.- Para seguir avanzando en nuestra sociedad se necesitan más mujeres en los ámbitos de toma de decisión como ayuntamientos, diputaciones, gobiernos, universidades, empresas, sindicatos.

TERCERO.- La actual situación de crisis económica, que perjudica tanto a hombres como a mujeres, hace que nuestros esfuerzos deban ir unidos para superar este delicado momento. Las medidas para hacer frente a la crisis no pueden dejar en la estacada a las mujeres; pero sobre todo, la crisis no puede ser la nueva excusa que interrumpa el proceso iniciado para avanzar en términos de igualdad en el mercado laboral. La recuperación económica tiene que venir acompañada por consolidar, también los derechos de las trabajadoras.

CUARTO.- Proponemos mantener y continuar potenciando, como tarea ineludible de nuestra sociedad, las acciones positivas para el acceso y mantenimientos de las mujeres en el mercado laboral, en igualdad de condiciones en cuanto a salario y calidad en el empleo.

QUINTO.- La conciliación familiar y laboral es la gran asignatura pendiente. Sin una política de conciliación decidida y eficaz, no es posible la igualdad en nuestra sociedad porque sin política de conciliación las mujeres siempre salen perdiendo. Reivindicamos hoy aquí que los gobiernos asuman como uno de sus objetivos políticos la conciliación familiar y laboral para que tanto hombres como mujeres puedan participar más en la vida familiar, pero sobre todo para que las mujeres puedan tener acceso a un empleo, a su permanencia en él y su promoción laboral.