El diario granadino EL CORREO (1913-1934), fué fundado por quien fuera su Director, Carlos Rocha Avellán y es sobre todo recordado por haber dado acogida a las publicaciones literarias del Movimiento de Vanguardia, "Rincón de Vanguardia" y "Página de Vanguardia", a cargo de Pablo Antonio Cuadra Cardenal y Octavio Rocha Bustamante, hijo éste último de don Carlos y padre de Luis Rocha Urtecho, quien, junto con su nieto Luis Javier Espinoza Rocha, retoman hoy "El Correo Nicaragüense"; un blog pluralista, que agradece la reproducción de su contenido.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Me quema la palabra

TAMBORES DE GUERRA CONTRA RAZONES DE PAZ

Luis Rocha

Tambores de guerra tienen la xenofobia, la intolerancia y el irrespeto a la soberanía de otros países, o el ignorar laudos históricos y tribunales y cortes internacionales que sirven para dirimir diferencias fronterizas o limítrofes. Razones de paz tienen la confianza en esos tribunales que existen para que no se propague el odio ni corra la sangre. Más aún, para que prive la civilización por encima del redoble fúnebre de la barbarie. Yo prefiero confiar en esas cortes que en la manipulación que del patriotismo suelen hacer insensatos en beneficio político deliberado, o xenofóbicos que viven agazapados tras el patrioterismo, para rebelarse como lo que son, precisamente cuando las circunstancias –como por las que en este momento atraviesan Costa Rica y Nicaragua- nos demandan cordura y fraternidad. No caigamos en la trampa de los falsos nacionalismos ni del patriotismo servido a la carta en la mesa de políticos irresponsables. Yo siento y estoy seguro que el Río San Juan es nicaragüense, y resiento que cada vez que lo queremos usar o reafirmar como nuestro, se incendian, provocados, los llanos de sus riberas.

Me alegra mucho la mesura con que los medios de comunicación de ambos países hermanos, tratan el problema. La serenidad apaga fuegos, y todo problema tiene su civilizada solución. Encontrar soluciones es razonar a favor de la paz. Redoblar tambores de guerra es propio de seres irracionales. Tengamos mucho cuidado sobre todo los nicaragüenses, que siempre vamos dando tumbos de trampa en trampa. Pero tampoco los ticos están exentos de caer en ellas y ojalá que no se vuelvan aliados indirectos de Daniel Ortega, quien a lo largo de su vida ha sido el gran estratega del caos y la confrontación, tanto a lo interno como a lo externo de mi patria. Mi patria, no la de él a la que ya desde ahora me declaro orgullosamente traidor. Soy traidor al concepto de patria de Daniel Ortega, porque no creo que el nacionalismo sea un instrumento para confrontarnos y abrir heridas.

Los conflictos y el caos son el hábitat de Daniel Ortega; su caldo de cultivo. De una prolongada y calculada confrontación –aunque solo sea verbal- con Costa Rica, él se levantaría enarbolando su rosada bandera de patriotismo, de cara a su reelección. Esa sería su gran inversión política. Por lo tanto, ticos y nicas seamos ecuánimes, y no nos dejemos provocar. Que la razón sea dada a quien por ley, justicia e historia, le asista. Nosotros los nicaragüenses debemos de confiar en fallos de justicia de cortes internacionales, y no en planteamientos demenciales que inútilmente tratan de ocultar las pretensiones reeleccionistas y dictatoriales, de quien ya ha violado nuestra Constitución con ese mismo propósito. ¿Nos vamos a distraer en indignarnos porque irresponsablemente se diga que los ticos nos quieren robar nuestro Río San Juan? ¿Van los ticos a permitir que dentro de su propia sociedad se aliente un prefabricado latrocinio y la xenofobia? Si de hablar de robos se trata, lo que a los nicas nos toca es no permitir que Daniel Ortega se robe Nicaragua.

luisrochaurtecho@yahoo.com

“Extremadura”, Masatepe, 4 de noviembre de 2010.

No hay comentarios:

Publicar un comentario