IGLESIA VIVA

A todos concierne la vida pública

La política se ocupa de la vida pública y a veces regula también algunos aspectos de la vida privada con incidencia pública. A todas las personas concierne de hecho la vida pública, aunque no a todas les interese. La política organiza la vida pública para que sea lo más y mejor organizada posible, y sería deseable que la organizara para que sea lo más justa posible, lo menos desigual posible, lo más y mejor informada posible, lo más libre posible, lo más corresponsable posible, lo más respetuosa posible de las diferencias de raza, de género, de edades, de lengua, de etnia, de cultura, de religión, y de las libertades de expresión, de movimiento, de reunión, de palabra, etc., para las mayorías y no solo para minorías privilegiadas, oligárquicas, bien se trata de oligarquías del dinero, del poder o de la cultura.

En la política todas las personas deberíamos estar interesadas. Sucede con la política como si hubiéramos hecho un pacto, una especie de convenio o acuerdo, para que las cosas caminen lo mejor posible en el municipio, en el departamento y en el país o en esta "aldea global" en la que se ha convertido el mundo. Modernamente, la Constitución es la expresión de ese pacto. Y por eso se elige a representantes constituyentes, es decir, personas con capacidad para elaborar y redactar un texto constitucional de leyes fundamentales, que luego se vota en referéndum o plebiscito. Ese texto no es irreformable, porque la vida
transcurre y las circunstancias en que vivimos cambian y hay que acomodar la Constitución a ellas, a veces solo para hacerla más capaz de ordenar la vida pública, pero otras veces para hacer más democrático y participativo el texto constitucional. Por eso es tan importante que las personas que se dedican a la
política respeten la Constitución y no la violen, obligando a la ciudadanía por la influencia o por la fuerza a convivir malamente sometida a los caprichos e intereses de los gobernantes. Pero no todas las personas pueden ni quieren dedicarse a la política o consagrar su vida a la política. Ni parecen tener vocación para ello ni sentir gusto por ello.

IGLESIA VIVA: Sección ecuménica de EL CORREO, con selección de textos de cristianos comprometidos con el Evangelio, y por ello con la esperanza, la justicia y la libertad.

El texto de hoy es tomado con la autorización de su autor del libro “NO SEA ASÍ ENTRE USTEDES: ensayo sobre política y esperanza”, de Juan Hernández Pico, S.J. UCA Editores, San Salvador, El Salvador, 2010.