El diario granadino EL CORREO (1913-1934), fué fundado por quien fuera su Director, Carlos Rocha Avellán y es sobre todo recordado por haber dado acogida a las publicaciones literarias del Movimiento de Vanguardia, "Rincón de Vanguardia" y "Página de Vanguardia", a cargo de Pablo Antonio Cuadra Cardenal y Octavio Rocha Bustamante, hijo éste último de don Carlos y padre de Luis Rocha Urtecho, quien, junto con su nieto Luis Javier Espinoza Rocha, retoman hoy "El Correo Nicaragüense"; un blog pluralista, que agradece la reproducción de su contenido.

jueves, 20 de octubre de 2011

NICARAGUENSES POR LA FAMILIA Y LA VIDA



¿Quiénes son, a qué partido político pertenecen, a que líder político siguen? ¿Será cierto ese fanático fervor anti aborto, o simplemente se trata de una fachada oportunista para conseguir réditos políticos?
Una cosa es segura: La responsable de ese ataque partidario, mientras no explique las cosas, es la Conferencia Episcopal, porque es uno de sus miembros el que aparece expresando la orden de no votar por la fórmula compuesta por Fabio Gadea Mantilla y Edmundo Jarquín Calderón. Si no me equivoco, el que instruye a la ciudadanía a no votar por quienes apoyan el aborto, es Monseñor Sándigo, Obispo de una de las diócesis del norte. Esta intromisión directa de la Iglesia católica, supera a la otra intromisión indirecta que hizo Monseñor Leopoldo Brenes y Solórzano, Arzobispo de Managua, cuando exhortó a la ciudadanía a no votar por quienes irrespeten la Constitución y las leyes de la República. El proceso de selección de candidatos presidenciales de la Iglesia Católica nos va aclarando el horizonte electoral, ya que estas dos llamadas de atención nos dicen claramente lo siguiente:
No podemos votar por quien viola sistemáticamente la Constitución de la República, por quien dispersó por el mundo la familia nicaragüense y mandó a la muerte a miles de jóvenes por una guerra insensata y caprichosa; no se puede votar por quien traicionó las esperanzas del pueblo al hacer retroceder el proceso hacia la democracia plena, no se puede votar por quien atracó las arcas del estado para hacer su fortuna personal enviando a miles de nicaragüenses a una muerte lenta por falta de hospitales y ausencia de medicinas, no se puede votar por quien se rodeó de funcionarios corruptos que se robaron el dinero de las pensiones de los jubilados y se robaron la ayuda para las víctimas del Mitch, para construirse mansiones frente al mar con terrazas gigantescas a la orilla de las azules aguas del océano pacífico. ¿Se podrá votar por un soplón inescrupuloso que negocia el tendido electoral por unos dólares más? ¿Se podrá votar por alguien  cuyo triunfo está en uno de los siete anillos que rodean al planeta Saturno y además permite que el representante legal de su partido en un departamento sea un miembro del partido de gobierno?
El que dispersó la familia y mandó a la muerte a los jóvenes inocentes de Nicaragua y ahora violenta la Constitución para quedarse en el poder, no puede escandalizarse ante el aborto.
El que fue acusado de malversar el tesoro nacional para derrocharlo en banquetes babilónicos y viajes escandalosos con una corte de más de cien serviles, no le luce escandalizarse por el aborto.
Digo esto por si es uno de ellos el patrocinador del spot sucio en contra de la alianza PLI-UNE. En caso negativo, la Conferencia Episcopal es la que está en la palestra puesto que ella misma dice que la Iglesia no puede tomar partido político en ningún momento y menos para denigrar.
Por supuesto que se trata de un burdo montaje con el que matan dos pájaros de un tiro: ponen en entre dicho la imparcialidad de la Iglesia Católica para pasarle la cuenta por sus críticas directas al gobierno de Daniel Ortega y a la policía nacional y a la vez le juegan sucio a la fórmula que los puede derrotar. Pero eso es una elucubración mía que no tiene ninguna validez, por lo que es necesario que los señores Obispos den a conocer su posición ante esta campaña sucia construida con imágenes que no concuerdan en el tiempo y el espacio.
Mientras eso sucede, Monseñor Sándigo sigue exhortando al pueblo a no votar por quienes apoyan el aborto y Edmundo Jarquín sigue repitiendo como disco rayado, yo creo en el aborto, yo creo en el aborto…… Y allá en la Secretaría General, alguien ríe a carcajadas por otro trabajo más de manipulación y desinformación.

Jorge J Cuadra V

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