Don Procopio y doña Procopia

(PARA EL DIA LUNES 26 DE DICIEMBRE/2011)

_  En ninguna época del año, como en la que estamos ahora, el egoísmo es mejor disfrazado con palabras de amor y paz, cosas inútiles, luces y colores, Procopió…

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_  La “goma” de eso, vivido más intensamente la noche de antenoche, apenas comienza a disiparse para tomar respiro y reiniciarla dentro de unos cuantos días, Procopiá,

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_  Para entonces, cuando venga la próxima segunda gran “goma” del nuevo año, Procopió, comenzará a sentirse el vacío de las palabras, la inutilidad de las cosas consumidas y lo adquirido para que dure la eternidad de un día…

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_  De todo lo dicho y lo adquirido con y para satisfacer el egoísmo, Procopiá, sobrevivirá el egoísmo mismo y sus expresiones exteriores: del gobierno, las consignas hechas frases de amor y felicidad en rótulos, spots de televisión y cuñas de radio…  

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_  Los colores y las luces de los “árboles de navidad” con todos sus artificios engañosos, Procopió, enlazarán con los “días santos”, cuando las consignas comerciales y las consignas políticas compitan: unas en tangas y las otras en su demagógica desnudez…

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_  Entre junio, julio y agosto, Procopiá, la mayor producción colonial de santos “aparecidos” estalla como carga cerrada, al son de los chicheros (a los que, no se sabe porqué, son los únicos músicos                a quienes llaman “filarmónicos”), entre “gomas” y elotes, en pueblos y ciudades…

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_  Luego, Procopió, las fiestas partidarias que se hacen en el salón patria, con discursos y escenarios floridos que entusiasman a estudiantes con el uso de las piedras… y no precisamente con el  mismo fin de Andrés…  

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_  Y todo sigue igual durante todo el año y en todos los lugares, con otros pretextos, pero con los mismos objetivos, Procopiá; y ese eterno festival demagógico, unos se van acostumbrando… y otros se van muriendo acostumbrados…

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_  Son las tradiciones, dicen, Procopió; y los dueños del poder económico y político, que es otra forma del negocio de las tradiciones y las traiciones, se van identificando en el camino…

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_  …Camino que no por casualidad, Procopiá, es el mismo por donde han venido quedando los caídos por balas y los caídos por “gomas” no de balas, sino de guaro…  

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_  Por todo ello, y para bien de todos ellos, los dueños de los negocios, no de los caídos, Procopió, han convenido en juntar sus afinidades… ¡bajo la oscuridad de una santa sotana!

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