30 de septiembre de 2010, 02:50 PM
Por Jeremy Laurence
SEUL (Reuters) - Una fotografía de un joven grueso con gesto inexpresivo sentado junto al convaleciente gobernante de Corea del Norte confirmó el ascenso del hijo menor de Kim Jong-il a futuro líder del aislado país comunista.
Kim Jong-un fue nombrado esta semana para importantes cargos políticos y militares en un país rodeado de secretismo, y cuyas aspiraciones de ser una potencia nuclear han preocupan al mundo desde hace años.
La foto, publicada el jueves por medios estatales, es la primera imagen que se distribuye desde el nombramiento del tercer hijo de Kim Jong-il, de unos veintitantos años, y sobre el que se sabe poco más allá de que fue educado en Suiza.
Las únicas fotografías anteriores de él se remontaban a su infancia.
Park Young-ho, del Instituto Coreano para la Unificación Nacional dijo que la foto brinda una confirmación no escrita de que el joven Kim es el heredero evidente.
"Ahora se ha hecho público que él es el sucesor (...) la foto muestra que Kim Jong-un es ahora el segundo hombre en la escala de poder de Corea del Norte", dijo.
La fotografía oficial de decenas de funcionarios militares y civiles muestra a un joven sentado en una posición destacada, dos lugares a la derecha de Kim Jong-il, en la primera fila.
Aunque no fue identificado oficialmente, el joven era la única persona de la fotografía que parecía tener la edad de Jong-un. Una fuente no identificada del ministerio de Unificación en Seúl dijo que el hombre, vestido con las tradicionales ropas de estilo comunista, era probablemente Kim Jong-un.
Sentado inmediatamente a la derecha del líder aparece en la foto otra figura en ascenso, Ri Yong-ho, quien está considerado dentro de la nueva generación de militares que podría actuar como nexo cuando Kim entregue el poder a su hijo.
La foto fue tomada frente al Palacio Memorial Kumsusan, antigua residencia oficial del abuelo de Jong-un y fundador del estado norcoreano, Kim Il-sung, con quien tiene cierto parecido.
Horas después, la televisión norcoreana mostró imágenes del mismo hombre joven en la conferencia del partido gobernante, parado entre cientos de otros delegados en un austero auditorio.
El joven Kim, con pelo corto y de altura promedio, aparecía aplaudiendo en la primera fila de la audiencia, y se encontraba cerca de su tía Kim Kyong-hui.
Luego de meses de especulaciones, el inexperto Jong-un fue ungido esta semana segundo de su padre en la poderosa comisión militar central del gobernante Partido de los Trabajadores.
El joven Kim, cuya existencia no había sido reconocida en Corea del Norte hasta esta semana, también fue nombrado general de uno de los mayores ejércitos del mundo. También fue nombrado miembro de un Comité Central en la mayor reunión política celebrada en el empobrecido Estado en 30 años.
También fueron ascendidos la hermana de Kim Jong-il y su marido, creando un poderoso triunvirato preparado para hacerse cargo de la dinastía familiar que ha gobernado Corea del Norte desde su fundación después de la Segunda Guerra Mundial.
Kim Jong-il, de 68 años, sufrió supuestamente un accidente cerebrovascular en el 2008, aunque es difícil evaluar su estado de salud a partir de la última foto. El líder norcoreano no ha dado muestras de ceder el mando del país y fue reelegido el martes secretario general del Partido de los Trabajadores.
Una sucesión estable sería un alivio para sus potencias económicas vecinas -China, Corea del Sur y Japón-, que temen que una caída del régimen lleve a flujos masivos de refugiados y posiblemente a una guerra civil.
Mientras tanto, la primera reunión en dos años entre militares de ambas Coreas terminó el jueves sin avances, dijeron funcionarios.
Durante las conversaciones en el pueblo fronterizo de Panmunjom, oficiales militares surcoreanos "instaron fuertemente a Corea del Norte" a admitir la responsabilidad en el ataque contra el buque de guerra Cheonan, a disculparse por el hecho y a castigar a los responsables.
Corea del Sur dice que un submarino disparó un misil que hundió la nave, pero Pyongyang niega la responsabilidad.
Un reporte de la reunión en la agencia oficial norcoreana KCNA calificó las acusaciones sobre el Cheonan como "una farsa barata organizada por el lado del sur" y dijo que la delegación de Pyongyang hizo una advertencia contra las invasiones navales surcoreanas en la disputada frontera marítima.
(Reporte adicional de Lee Jaewon y Yoo Choonsik; editado en español por Hernán García y Carlos Aliaga)
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