Acaba de aparecer un libro sobre la pintura del pintor primitivista de Solemtiname Carlos García. El padre Miguel de Escoto y el presidente de la Academia de la Lengua don Francisco Arellano Oviedo me solicitaron que escribiera un ensayo sobre dicho pintor; mi ensayo de 27 paginas fue censurado en las primeras 7 paginas, se me suprimió el proceso del primitivismo desde los primeros tiempos hasta la actualidad , quedando yo como un ignorante en esa tendencia pictórica que conozco muy bien, ademas de un incapaz escritor con faltas de concordancia y coherencia en el discurso critico.Como si fuera poco la burla se me acusó de haber escrito las opiniones de los escritores sobre Garcia, que por fortuna la gran mayoría están vivos y pueden reclamar su autoria. Nunca se nos dijo, me reveló Arellano Oviedo que el libro seria dedicado al Presidente de la República de Nicaragua Daniel Ortegaa Por mi parte yo no le hubiera dedicado el libro al Presidente Ortega porque me desconoce, no sabe quien soy, si valgo o no valgo y uno no puede reclamar ni afectos ni reconocimientos. La dedicatoria le debe haber parecido algo extraño para él, que un pelele ignorado le hiciera una ofrenda ociosa, gratuita o servil. Mucho menos hubiera firmado ni escrito el ensayo sobre Garcia, a quien creo un gran pintor, cuando el prologo del libro del padre Escoto contiene insultos contra el Padre Cardenal. Algo inaudito y espeluznante que un sacerdote befe a otro sacerdote, criatura consagradas. Cardenal ha sido para mi desde la adolescencia un maestro como poeta, un modelo espiritual y una suerte de padre no biológico. Por lo tanto me abstengo de la dedicatoria ,no admito y rechazo insultos para Cardenal ni acepto el ensayo sobre García porque los editores y traductores hicieron lo que quisieron con el, no es mio. No soy mercenario ni falsificador ni estafador como critico.
Julio Valle-Castillo
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