El diario granadino EL CORREO (1913-1934), fué fundado por quien fuera su Director, Carlos Rocha Avellán y es sobre todo recordado por haber dado acogida a las publicaciones literarias del Movimiento de Vanguardia, "Rincón de Vanguardia" y "Página de Vanguardia", a cargo de Pablo Antonio Cuadra Cardenal y Octavio Rocha Bustamante, hijo éste último de don Carlos y padre de Luis Rocha Urtecho, quien, junto con su nieto Luis Javier Espinoza Rocha, retoman hoy "El Correo Nicaragüense"; un blog pluralista, que agradece la reproducción de su contenido.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Caricatura

1314711933_CaricaturaG.jpg

Facundo, Fariñas y el Cártel de Sinaloa

Sylvia Gereda

La periodista mexicana Lydia Cacho es una de las más prestigiosas en la investigación de trata de blancas. En 2000 fundó el Centro Integral de Atención a las Mujeres (CIAM) en Cancún, Quintana Roo, un centro especializado de atención a mujeres, niños, víctimas de violencia doméstica y sexual. Su libro, Esclavas del poder, es una de las más impactantes historias que aborda la trata sexual de niñas y mujeres en el mundo. Y, por ser ella una de las autoridades en la materia, es que hoy transcribo parte de un artículo que ha publicado Cacho hace algunas semanas en la revista digital Sin embargo, titulada "Facundo y el cártel de Sinaloa". En ella devela verdades ocultas que el Gobierno no se ha atrevido a revelar y temas que los medios de comunicación guatemaltecos aún no han tratado. Este es un fragmento de la historia oculta que existe detrás del asesinato de Facundo Cabral. La investigadora y novelista mexicana comienza con una sugerencia al presidente Álvaro Colom, donde le dice: "Si en verdad quiere esclarecer el asesinato de Facundo Cabral, tanto para el Gobierno argentino como para el mundo que amaba al poeta errante de Latinoamérica, el presidente Colom tiene que ir a dos lugares: la cárcel de Guatemala y tres bancos mexicanos".

"Los asesinos iban tras el empresario Henry Fariñas, eso lo dice todo el mundo. Lo que no dicen los medios guatemaltecos es que este hombre, nacido en Nicaragua, ha sido durante años el lavador de dinero del cártel de Sinaloa. Su trabajo es efectivo, pero no imposible de investigar. Su nombre apareció hace años cuando investigábamos a las redes de tratantes de mujeres de América Latina. Fariñas es copropietario de una cadena de bares y prostíbulos denominados Elite, con instalaciones en Panamá, Costa Rica, Colombia, Nicaragua, México y Guatemala. Estos bares de bailarinas eróticas son parte de una gran red de trata de mujeres que, desde Nicaragua, Paraguay, El Salvador, Colombia y el Caribe, son traficadas para explotarlas no solamente en ambientes de prostitución forzada, sino también como parte de las redes de tráfico de drogas y blanqueo de dinero.

Llama la atención que los medios guatemaltecos se refieran a Fariñas, hijo de un pobre afinador de pianos, como "el reconocido empresario de la cadena de centros nocturnos", y no hagan referencia a las investigaciones que la DEA lleva a cabo desde hace años, para seguirle la pista a este emporio de trata de mujeres cuyo objetivo final es mover dinero en efectivo desde Panamá hasta México. La desgracia para Facundo Cabral y David Llanos, su representante, fue haber aceptado que Fariñas les llevara al aeropuerto. El nicaragüense recogió a Cabral y a su agente en el Hotel Tikal. Los sicarios los persiguieron, y Fariñas, al volante, se salvó de la muerte, todo indica ordenada por Daniel Pérez Rojas, alias el Cachetes, preso en Guatemala por delitos graves y acusado por homicidio. Si el presidente Colom y su Fiscal General lo deciden, podrán llevar a cabo uno de los golpes judiciales más importantes de su país, para evidenciar los vínculos entre la trata de mujeres de Centroamérica y el Caribe con los carteles regionales. Si la DEA decide participar directamente con la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, la muerte del cantante pudo haber servido para evidenciar una de las redes de esclavitud de mujeres más poderosas de la región, cuyas ganancias multimillonarias terminan en bancos mexicanos y norteamericanos.

Con la muerte de aquel poeta, a quien la UNESCO nombrara el "Mensajero Mundial de la Paz" en 1996, tal vez cientos de mujeres y niñas arrebatadas de sus hogares, forzadas a la prostitución y al narcotráfico, podrán librarse del miedo y saldrán de esa red en la que desde hace años viven atrapadas, temerosas de hablar. No soy la única reportera que investigó esta red y que conoce la magnitud que le adjudican la DEA e ICE, lo curioso es que ni los medios de Guatemala ni su propio presidente estén ya sobre las pistas evidentes, y escuchando a aquellas mujeres que escaparon y que, desde hace años, intentan revelar cómo funciona la esclavitud femenina como una herramienta para la delincuencia organizada.

Mientras escribía mi libro Esclavas del poder, una diputada guatemalteca recibió amenazas de muerte de un militar que protegía a esas redes. Ahora, ella espera que las autoridades hagan lo que les corresponde, aunque caigan altos funcionarios guatemaltecos vinculados con la protección de los tratantes, pese a que caigan los poderosos militares que son, a la vez, asociados y clientes asiduos de estos delincuentes guatemaltecos encabezados por Fariñas y sus socios. Qué dice la Fiscal General de la Nación y el presidente Colom. ¿Se atreverán a destruir una de las redes más peligrosas del mundo y encarcelar a sus miembros enquistados en las redes de poder? Pronto veremos hasta dónde llega la justicia guatemalteca.

*Este artículo fue publicado originalmente en el Periódico de Guatemala

“Cartas marcadas” en elecciones nicaragüenses

Carlos Salinas Maldonado

Nicaragua ha despertado recientemente el interés de dos importantes publicaciones internacionales. El diario español El País dedicó este lunes su editorial a la crisis política que atraviesa Nicaragua, centrándose en la inconstitucional candidatura del presidente Daniel Ortega, pero también en la irregular administración del proceso electoral, que para los editorialistas del diario hace que esta sea una elección con las “cartas marcadas” a favor del Frente Sandinista.

Por su parte, el prestigioso semanario británico The Economist publicó el pasado 27 de agosto unanálisis sobre el pragmatismo económico del Gobierno de Ortega, quien mientras mantiene un fuerte discurso socialista, hace campaña de su inconstitucional candidatura y viola la independencia de los poderes del Estado, corteja "a los peces gordos del mundo capitalista”, a quienes ofrece incentivos para que inviertan “en la república socialista”.

Tanto El País como The Economist centran su atención en la que ha sido la base económica que ha permitido a Ortega desarrollar en el país su proyecto político: la cooperación petrolera que le entrega su colega venezolano Hugo Chávez, hoy en tratamiento médico a causa del cáncer que padece.

La ayuda de Chávez

Según el diario español, Ortega “representa más bien un neosandinismo por las escisiones y defecciones que ha sufrido su partido, el Frente, desde que acabó con la dictadura de Somoza, optó en 2007 por ponerse bajo la advocación del venezolano Hugo Chávez, al que ha seguido con fidelidad bien remunerada por el crudo a precio de amigo”, explica El País en su editorial.

“En imitación de su mentor, Ortega trata ahora también de eternizarse en el poder. Y así es como obtuvo en 2009 un dictamen de la Corte Suprema, de mayoría sandinista, que declaraba inaplicable el artículo 147 de la Constitución -el que establecía aquellas limitaciones- invocando el supremo poder "que reside en el pueblo". El presidente recurría de esta manera a enmendar subrepticiamente la Constitución porque no tenía los escaños necesarios para hacerlo en la Asamblea Nacional”, resalta el editorial.

The Economist, por su parte, destaca que la alianza entre Chávez y Ortega ha permitido a eéste último impulsar programas clientelistas que le han valido el apoyo de amplios sectores sociales: techos de zinc, bono productivo, subsidios al transporte público. Sin embargo, el semanario económico destaca que parte de la ayuda venezolana va a parar a las arcas de la empresa mixta Albanisa, que “a menudo” invierte esos fondos de manera “opaca”, adquiriendo hoteles como el Seminole (“donde la bandera venezolana se cuelga en el vestíbulo”) o medios de comunicación. Tal dependencia de Ortega hacia Chávez, lleva al semanario británico a preguntarse qué pasará si ayuda se cortara. Y es ahí donde entra el pragmatismo de Ortega, según The Economist:

“Esta alianza ha ayudado a proteger a Nicaragua de la crisis en los Estados Unidos. El año pasado la economía creció más rápido que la de cualquier otro país en América Central, aparte de Panamá. Pero la oleada de interés en cortejar a otros capitales extranjeros sugiere un deseo de diversificar. El presidente de Venezuela y su economía están mal, si la salud de cualquiera se deteriorarse aún más, Nicaragua tendrá otros amigos. Ortega, quien fue presidente de Nicaragua durante los últimos estertores de la Unión Soviética, sabe muy bien lo que es perder a un hombre rico”, explica el semanario.

Tanto El País como The Economist hacen referencia a los golpes que el mandatario ha dado a la débil institucionalidad del país, incluyendo su fuerte influencia en el Consejo Supremo Electoral (CSE), encargado de administrar las elecciones de noviembre. The Economist recuerda que los tribunales nicaragüenses están entre los menos independientes del mundo, y menciona un informe del Foro Económico Mundial que en ese sentido sitúa a Nicaragua en el puesto 132 de 139 países.

Sin embargo, el semanario destaca que para los inversionistas pesan más las cuestiones relacionadas a la infraestructura que la corrupción y gobernabilidad, aunque destaca que “empresas más pequeñas, como los hoteleros y la industrias de capital intensivo, tales como generadores de electricidad, son los más nerviosas. Mantener su interés será crucial si Nicaragua espera mantenerse a flote cuando la generosidad de Venezuela se agote”, advierte The Economist.

Cartas marcadas para Ortega

En ese contexto de control institucional y con la garantía del flujo de petrodólares que llega desde Caracas, el diario El País señala que la elección de noviembre es prácticamente un juego con las “cartas marcadas” a favor de Ortega.

“Las votaciones de noviembre podrán ser más o menos convincentes, pero todo conspira para que la victoria de Ortega esté adquirida de antemano”, explica el diario. El País señala las irregularidades que hacen que estas elecciones bien puedan desarrollarse de forma poco transparente:

“Docenas de miles de ciudadanos carecen de identificación para votar, y eso ocurre, casualmente, en zonas apartadas de fuerte reputación antisandinista como Siuna, donde ha habido por ese motivo enfrentamientos con la fuerza pública; gran parte de los medios de comunicación, en especial audiovisuales, son afectos al poder; la oposición se presentará desunida con un candidato del partido liberal, el expresidente Arnoldo Alemán, condenado a 20 años por corrupción y excarcelado por dudosa decisión judicial, y el empresario Fabio Gadea, lo que dividirá el voto contrario a Ortega; y para que no falte de nada, al sandinista le bastará con obtener en primera vuelta un 35% de sufragios con diferencia de cinco sobre el segundo para ser proclamado presidente. Así ganó en 2006”, resume El País.

Por lo tanto, el prestigioso diario español afirma que “las cartas están marcadas en Nicaragua”, y concluye que "sería preciso una proeza ciudadana y un milagro contable para arrebatarle el triunfo a Daniel Ortega".

El maestro dijo adiós

El más grande y carismático periodista de la vieja guardia, reconocido como el mejor titulador de las últimas décadas, cerró un gran capítulo de la comunicación en el país

Luis Galeano

Archivo / END El doctor Danilo Aguirre, en un día cualquiera en lo que fue su oficina en END. A su espalda, la inseparable máquina de escribir mecánica en la que tecleó centenares de títulos que día a día fueron leídos por el país entero.

La figura robusta de Danilo Aguirre Solís no apareció como habitualmente lo hacía a las 11:30 de la mañana de cualquier día, sin importar si fuese fin de semana o feriado. Tampoco lo hizo a las 3 de la tarde, y la noche cayó sin que el tecleo de la Olympia en su oficina interrumpiera el silencio de los aires acondicionados, como lo hacía hace casi 32 años. DAS se fue.

Fue el primer fin de semana sin su andar pausado y solemne, sin el “Harry”, “Edwin”, “Juan Ramón”, “Carlos”, “Luis”, “Vladimir” “Gustavo” o “Ernesto”, que salían repentinamente desde su oficina, buscando a alguno de los editores.

Ese escondite desde el cual “el Doctor” --como le llamamos todos-- produjo los más geniales títulos de periódico que han visto los nicaragüenses en las últimas tres décadas, y que le dan, por ello, el crédito de ser el mejor titulador del país, estuvo vacío, y tocó poner el título sin él.

Todos los que trabajamos en EL NUEVO DIARIO este fin de semana, y los que se incorporan a partir de hoy a las labores del medio, nos sentimos huérfanos de padre, porque eso era DAS para todos.

Su voz de tenor, con la que también interpreta de excelente forma sus tan gustados tangos, ya no la escucharán personalmente Hermelinda Videa o Carlos “Tranquilo” Gutiérrez en la recepción del diario, preguntando si hay correspondencia para él.

Tampoco Lizbeth García ni María Teresa Pérez, editoras de Sucesos y de Variedades, hasta cuyos escritorios se acercaba en su itinerario de día a día con la inquietud de “¿qué me tenés? ¿nada?” Para Luego dar vuelta y buscar su oficina para conocer cómo andaba la agenda del periódico.

Su esencia
Su profesionalismo, su pasión por la profesión y su manera de abordar los temas, su forma de enseñar regañando con cariño y reconociendo con valor, así como su olfato periodístico a veces premonitorio de tanto andar y andar en estas lides --desde que fundó END junto a Xavier Chamorro Cardenal el 19 de mayo de 1980--, definitivamente que harán falta.

Su gran bagaje fue el que en múltiples ocasiones detuvo un escrito que podía narrar de manera desacertada la historia de un hecho acaecido en el pasado en Nicaragua o en cualquier país del Continente, de índole política, social, deportiva o cultural.

“El buen periodista de prensa escrita, el buen editor, es aquel que desde que se levanta tiene un periódico en la cabeza y se acuesta pensando en el periódico del día siguiente”, recomendaba de DAS a quienes tuvimos el honor y el privilegio de trabajar con él.

La noticia: “Hoy me voy”
El viernes 26 de agosto de 2011 será un día que no podremos olvidar. Llegó su última rutina. “No se extrañen, que un día me tengo que ir”, dijo el Doctor al personal el 12 de mayo de este año, cuando END había sido vendido al empresario Ramiro Ortiz Mayorga.

No fue ni será nada fácil. De un momento a otro nos hemos quedado sin uno de los últimos robles del periodismo, que combatió la sangrienta dinastía de los Somoza a base de titulares y de abordaje noticioso, que perdió a uno de sus hijos en la lucha, además de haber perdido a su compañero de mil batallas, Pedro Joaquín Chamorro, sintiendo el resoplar de los pulmones estallar de rabia y titulando: “Mandaron a asesinarlo”, sin dejar de vaticinar: “Los enterrados serán ellos”, como efectivamente ocurrió cuando triunfó la Revolución, un año y medio después de aquel fatídico 10 de enero de 1978.

Se iba el hombre que tanto entregó al país, desde su silla de director, acompañando logros del proyecto revolucionario y también criticando desaciertos.

El hombre que se opuso desde sus teclas, a la privatización de los bienes del Estado en los años 90, y que criticó la enorme corrupción de la que hicieron gala Arnoldo Alemán y sus adeptos, los “carreterazos” y gastos confidenciales de la era de Enrique Bolaños.

El que no dudó en ver frente a frente al gobierno del actual presidente Daniel Ortega, en sus violaciones a la Constitución, los negocios de Albanisa, la discriminación que nace del sectarismo con que se distribuyen los beneficios de la cooperación venezolana administrada de forma privada, y la corrupción del Poder Electoral, entre varios desmanes.

Abrazos y lágrimas
Se trata de un flashazo que nos ha dejado viendo a tientas. DAS abrazó con cariño a todo el que se le acercó para despedirse de él, no faltaron las lágrimas de los viejos y de los jóvenes, de periodistas, de diseñadores, de editores, de correctores, y hasta de los celadores. No faltaron las fotos de “la última vez”, la que siempre guardaremos. Su falta es inmensa y se sentirá en cada edición. Decir que todo será igual, sería mentirnos y mentirles a quienes nos leen a diario.

“Confío en ustedes, sé que no aré en tierra muerta, sino en tierra fértil”, nos indicó antes de salir de la redacción, estampando su último titular: “Padre fue estrangulado”. “Me toca batallar desde afuera”, dijo minutos después, rodeado de hombres y de mujeres de prensa; y de amigos, en la Peña de Periodistas, con un temple y seguridad bota montañas.
El “clack, clack, clack, clin” de su inseparable compañera, Olympia, se detuvo sin avisar.

¿Ha pensado alguna vez que el que escribe podría ser su último titular?, le pregunté en mayo de 2010, cuando le hice la única entrevista que brindó sobre su bello arte de titular.

“Murió al pie del cañón”, me respondió, con la ilusión de morir frente a su escritorio en END.

“Pero ese titular ya no voy a ser yo quien lo va a poner”, añadió, con una sonrisa que daba por concluida aquella conversación.

No murió al pie de cañón, pues sigue rebosante de vida “y más vivo que nunca”, según declaró el mismo el 29 de mayo, cuando se le rindió un homenaje. Su cañón está en él mismo, en su espíritu, en sus titulares.

Una despedida para cada quien
Luego de la reunión de editores la tarde del viernes, me quedé viendo con él la jerarquización de las noticias políticas del día, como siempre lo hacíamos. Me vio y me dijo: “Hoy es mi último día, Juan Ramón”. Asentí por el respeto a él. Guardé silencio. Me corrió una descarga violenta en mi espina dorsal. Juan Ramón Huerta, editor de Política.

La llamada para que llegara a su oficina, casi a minutos de retirarme, a las siete de la noche, hizo confirmar lo que presentía sin que nadie me lo hubiera dicho. Era la despedida del doctor Aguirre, quien conociendo a cada uno, le dijo a Ernesto: “Llamame a Carlitos…”. La noche del 26 entonces se hizo más oscura. Carlos Martínez, editor.

Me lo encontré en las escaleras de END. Me detuvo, me echó el brazo sobre el hombro izquierdo y me dijo de golpe: “Vladimir, hasta hoy trabajo con ustedes. Voy de vacaciones y no regreso”. “¡¿Ideay?!, le pregunté, “es que es mejor así, ya lo decidí”, me explicó. Nunca había sentido tan largas y pesadas esas escaleras. No fue ni será fácil asimilar su partida. Vladimir López, editor Internacionales.

“Me dijeron que se iba, fui a su oficina, lo abracé y él me dijo, ‘muchas gracias Carlitos, por todos los servicios ofrecidos’”. Carlos “Tranquilo” Gutiérrez, conserje.

“Me sentí golpeado al escuchar que él se retiraba del medio siendo un maestro y fundador. Me llamó como siempre, creí que era para ver el diseño de la portada, pero no, era para tomarnos una foto de despedida que mis compañeros habían solicitado. La cámara sonó y yo no salía del asombro”. Harry Calero, jefe de diseño.

“Siento lo mismo como cuando en mayo pasado fueron retirados varios compañeros de Redacción. Se fueron esos talentos y tanta experiencia, como hoy se marcha el doctor Danilo Aguirre. Él desarrolló su marca: notable trabajador, un intelectual de alto calibre. Cuando se escriba la historia del periodismo nicaragüense, su nombre, creo yo, estará entre los tres primeros, me atrevería a asegurarlo. Edwin Sánchez, editor.

El exdirector de END explica su salida del periódico que fundó en 1980:
“Solo cierro un ciclo más de vida”

José Adán Silva
La salida del fundador de EL NUEVO DIARIO, doctor Danilo Aguire Solís, no fue un acto intempestivo ni violento, sino un proceso que venía siendo analizado desde que se conoció que el periódico había sido ofrecido en venta por iliquidez económica, confirmó ayer el histórico exdirector de este rotativo, en la comodidad de su hogar.

Aguirre Solís estuvo en el cargo de director-fundador hasta el viernes 26 de agosto, cuando cerró su última edición y tomó vacaciones acumuladas, tras las cuales se hará efectiva su renuncia al proyecto periodístico que ahora es administrado por un nuevo grupo económico encabezado por el empresario Ramiro Ortiz Mayorga.

“Yo ya había manifestado (mi intención de retirarme) desde que END se había intentado vender a un grupo político, y cuando se dio la noticia de que sus acciones habían sido vendidas a nuevos dueños, tenía pues, un tiempo prudencial para retirarme del periódico”, dijo Aguirre.

Añadió que la decisión la contempló personalmente al enterarse de que hoy asumirá una nueva Junta Directiva y nombrarán un nuevo Consejo Editorial.

“El peso mío sobre el periódico era muy grande, y aprovecho con esto, para aclarar una lluvia de rumores, y afirmar que de los nuevos dueños yo no he recibido nunca reclamo o presión, jamás recibí una llamada o una palabra de atención para que en el periódico no se publicara algo”, explicó, tras dejar claro que tampoco hubiese aceptado ninguna imposición.

“En honor a la verdad, las únicas manifestaciones que he tenido de los nuevos propietarios, por medio de algunas de las personas con que he tratado, han sido respetuosas y hasta con admiración, algo que es poco modesto de parte mía”, indicó Aguirre, de 71 años.

Admitió que se llevó muy bien con el actual director de END Francisco Chamorro, a quien reconoció por el alto respeto que mantuvo, y que se fortaleció hasta el último momento.

“Nunca tuve problemas con Francisco, él me respetó y yo lo respeté”, aseguró.

Mantener viva marca del diario
“Yo tengo confianza en que los compañeros colegas periodistas, muchachos limpios y profesionales, valientes y comprometidos con Nicaragua, van a mantener viva la parte fundamental de EL NUEVO DIARIO, que ha sido una lucha permanente por las libertades, por la democracia y por los principios de legalidad, Estado de Derecho y Justicia”, exclamó Aguirre, para quien se cierra una nueva etapa de su vida, para dar paso a otra.

“He cumplido un ciclo más de mi vida, como he cumplido y cerrado otros”, expresó.

“Pedí vacaciones, pero tené la plena seguridad de que en dos cosas me van a ver, en algún proyecto relacionado con la comunicación y en alguna trinchera luchando por la transformación social de este país, ahora que no tengo el impedimento o el compromiso de ser el director de un diario pluralista para expresar mis ideas políticas, pero voy a seguir luchando”, concluyó.

Edén Pastora continúa su cinismo

EFE


Edén Pastora, el mítico "Comandante Cero", anunció hoy que acusará por delitos de lesa humanidad al cineasta sueco Peter Torbiörnsson, autor de un documental sobre un atentado contra la vida del exguerrillero.

Pastora sostuvo en rueda de prensa que Torbiörnsson y el supuesto autor material del atentado, el argentino Vital Roberto Gaguine, ya fallecido, son los "únicos" responsables de la detonación de una bomba durante una rueda de prensa en 1984, en el que murieron tres periodistas y otras 20 personas resultaron heridas.

El "Comandante Cero" también acusará a Luis Carrión, uno de los antiguos nueve "comandantes" de la revolución sandinista y viceministro del Interior en el primer régimen sandinista (1979-1990), de quien dijo conocía esa acción.

Pastora precisó que a Torbiörnsson lo acusará "por el delito de crimen de lesa humanidad contra hombres y mujeres inocentes" y a Carrión porque, al conocer del complot, debe responder ante "los tribunales nacionales e internacionales".

"Lo voy a acusar a él (Carrión) seriamente y a Torbiörnsson", indicó Pastora, sin precisar fecha.

El miércoles pasado Torbiörnsson (1941) estrenó en Managua el documental 'Último capítulo: Adiós Nicaragua', un testimonio audiovisual basado en el atentado en La Penca (1984) contra Pastora en campamentos de la "Contra", en el que descarta a la CIA como responsable de ese complot.

La cinta, dirigida por el periodista sueco, que sobrevivió a ese atentado, señala al exministro del Interior y actual embajador de Nicaragua en Perú, Tomás Borge, de ser el autor intelectual de ese atentado.

También al fallecido coronel cubano Andrés Barahona López, conocido con el seudónimo de Renán Montero y quien dirigía la Quinta Sección del Ministerio del Interior y al exjefe de la Seguridad del Estado Lenín Cerna, colaborador del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.

Pastora, sin embargo, descartó que esos dirigentes sandinistas supieran del complot en La Penca e insistió que Torbiörnsson "actuó por la libre".

El atentado se registró el 30 de mayo de 1984, en la margen nicaragüense del río San Juan, que sirve de frontera entre este país y Costa Rica, cuando el entonces antisandinista Pastora, que dirigía una facción de la "Contra", comparecía ante la prensa en medio de la situación de guerra que se vivía en este país.

En ese atentado murieron los periodistas Linda Frazier (estadounidense), Jorge Quiroz y Evelio Sequeira (costarricenses) y resultaron heridos, además de Pastora, hoy reconciliado con Ortega, cinco rebeldes y casi una decena de informadores.

Según el "Comandante Cero", Torbiörnsson y Gaguine (que se hizo pasar por el periodista danés Per Anker Hansen) eran agentes internacionales "fieles, leales y voluntarios" de la sección de contrainteligencia del Ministerio del Interior que tenían la misión de asesinarlo en un campamento.

Afirmó que, al no conseguirlo, "por desesperación", decidieron detonar, sin permiso de los sandinistas, la bomba.

Sostuvo que Torbiörnsson era doble agente al servicio de la CIA (Central de Información de Estados Unidos), quien estudió sus movimientos tres meses antes del atentado y, según él, pagó al periodista sueco todos los gastos del documental para afectar a los sandinistas en la actual campaña electoral.

Torbiörnsson sostiene en el documental que fue un "tonto útil" de los sandinistas en los años ochenta y nunca supo que Gaguine, quien se hizo pasar por fotógrafo, detonaría la bomba.

En el filme, quienes confirman la versión del periodista sueco son Carrión, actual crítico de Ortega, y Jorge Masetti, un desertor cubano que participó con las tropas que tenía Cuba en Nicaragua al mando de Montero.

El testimonio audiovisual, que fue estrenado el año pasado en España, mereció el premio Giraldillo de Oro a la mejor película documental europea, en el Festival de Sevilla 2010.

martes, 30 de agosto de 2011

La campaña de las palabras “reveladas”

Onofre Guevara López

“En el Frente Sandinista nos sentimos orgullosos

de poder proponernos esa campaña de Luz, Vida

y Verdad, de triunfo en Luz, Vida y Verdad, de

triunfos en Amor, Paz y Vida, porque eso

representa los cambios que hemos ido

consolidando en la manera de vivir,

de pensar y de ser.”

Rosario Murillo

Tras el culto a las palabras con las cuales se busca rendirle culto a un individuo está el culto hacia la misma persona que las rebusca, y el culto de ambos hacia el poder. Y, aunque éste no es nada insustancial, lo son las palabras con que se adorna el deseo de seguir usándolo hasta el infinito, sin legalidad ni méritos. Así, las palabras desgastan su representación de la cosa, la idea y del concepto, y con ellas crean un ideal de mundo, al mismo tiempo que se alejan del mundo real.

En este mundo real, ¿qué es una “campaña de luz”? Si es de luz incandescente, indicaría que está ardiendo, excitada por las altas temperaturas de la ambición. Si es del tipo luminiscente, ha de ser la campaña en la que se gastan tanta energía eléctrica en un carnaval de luces en rótulos, tarimas, radios, televisoras, internet, con todo el furor de quienes saben que, con lo que no cuesta, se hace una buena fiesta.

¿Y qué es una “campaña de vida”? ¿Quien ignora que hay vida animal, vegetal y mineral? Y dentro de la vida animal, los seres humanos son los “reyes”, pero no todos reinan, pues unos pocos tienen vida de rey y otros, que son mayoría, tienen vida miserable, casi de animal. En esta profunda contradicción, y no de pura chiripa, se distingue la vida burguesa de los dueños de esa “campaña de vida”. Es decir, la dulce vida que da el poder. Está también la vida de perros y de otras mascotas, igualmente desigual, según el nivel la vida de sus amos.

Existe la vida de vida vegetal, y en este reino, son reyes los depredadores de montañas, a la que le trazan el camino hacia el exterior para regresar convertida en papel o en papeles verdes. Al final, a los naturales dueños de las montañas les queda sólo el talalate para sus cajas mortuorias. De esa vida saben mucho los agentes depredadores que los dueños de la “campaña de vida” mantienen en el Caribe.

De la vida mineral, los de la “campaña de vida” sacan el maldito oro que les bendice la vida desde las entrañas de la mina El Tritón”, adonde llegó su ex jefe de seguridad, a presionar a los mineros con sólo mencionarles los nombres de sus dueños, uno de los cuales es también la persona objeto del culto de palabras.

¿Cuál es lo cierto de la “campaña de verdad”, si no la de querer perpetuarse en el poder con su líder? Si la verdad sigue siendo la calidad de lo cierto, tendrían que confesarle al pueblo, cómo de pobres ciudadanos sin oficio ni beneficio llegaron a convertirse en señores millonarios. En esta “campaña de verdad”, debería informársele al pueblo acerca de a cuánto asciende en dinero lo recibido hasta hoy de la colaboración venezolana. De paso, deben informar al potencial votante sobre el motivo, la razón o la circunstancia que les obliga a guardar silencio ante las denuncias y las pruebas de la corrupción de Roberto Rivas, por medio de la institución que tan bien les sirve.

Sería lógico que los líderes de esta “campaña de verdad” acompañen su opinión sobre Rivas con algo acerca de su enriquecimiento –de verdad sin medida—, que les hizo experimentar cambios importantes en “la manera de vivir, de pensar y de ser” de que hacer gala. Aunque esa sí, es una verdad que no necesita de campaña para saberla: ya no viven ni piensan de igual manera que hace unos treinta años; pues entonces, pensaban en hacer cambios revolucionarios en las estructura económica, política y social de Nicaragua, y hoy están pensando en cómo prolongar ilegalmente su control del poder, reestructurando el sistema social capitalista, en la cual ellos forman el núcleo principal de la clase dominante. Luego, tienen una vida de grandes burgueses, pero eso sí, ahora ya son muy consecuentes con el marxismo, por cuanto piensan conforme viven.

¿Y qué significa un “triunfo en luz”? Si no se refiere al hecho de que al gobierno lo hicieron socio de la transnacional Unión Fenosa –hoy Gas Natural—, es difícil adivinarle a qué otra cosa se refiere. Talvez, quien sabe, podría ser un “triunfo en luz” el hecho de poder hacer derroche de luminarias en los “árboles de la navidad” de todo el año. ¿Acaso esa luz de sus triunfos tiene que ver también con el hecho de no pagarla? Si por casualidad el “triunfo en luz” tiene un significado esotérico, talvez tenga que ver con la luz de la Luna llena contra las sombras de la noche que todo lo da. Difícil saberlo, a través de las palabras de una “campaña de verdad” hostigosa y saturante.

Y un “triunfo en vida”, puede significar muchas cosas. Y, tratando de adivinar algo, lo primero que uno se imagina es la referencia a su propia vida de triunfo, diametralmente contrario a la vida sin triunfo de los héroes caídos y sobre cuyo sacrificio se levanta su imperio económico familiar. Conclusión inevitable: si los del “triunfo en vida” no fueran tan vivos, ¿cómo hubiesen podido acumular tan buenos triunfos en lo económico y lo político?

¿Y qué hay de un “triunfo en verdad”? Eso parece más sencillo: un fraude electoral, por ejemplo, en verdad es un “triunfo”, pero no de verdad. La diferencia está en una letra, pues la preposición en indica relación de lugar, de tiempo, modo, y medio. Así, que en verdad, en todo el país tuvo lugar un fraude electoral; en verdad, ocurrió en noviembre de 2008; en verdad, fue hecho del modo más descarado: y en verdad, fue realizado por medio de la alteración de las actas, de la presión y soborno de fiscales “opositores”, y de la ocultación de otra cantidad de actas, las cuales siguen “perdidas”.

¿Qué es un “triunfo en amor”? Lo pregunto, porque, según se sabe, lo suyo no es un “triunfo en amor, sino “de amor”, pues la preposición de significa: posesión, origen, modo, materia. Y sus triunfos conocidos son de amor al poder; de amor a la posesión de bienes; de amor al origen de esos bienes, que es el poder; de amor al modo de obtenerlos; y de amor a esos bienes de cualquier clase o materia que sean.

¿El “triunfo en paz” qué es? Sencillo: que no hay tenido tropiezos para lograr de todo lo que han querido desde el poder, sino en completa tranquilidad, en paz, pues. Del “triunfo en vida”, ya hablamos: la vida desde el poder, es vida en rosa.

Ya ven, cuántas cosas ocultas hay en el discurso electorero y cantinflesco. Se pueden sacar a luz desde un simple párrafo, sin necesidad de hacer grandes esfuerzos, sino poniéndole un poco de atención. Nada más.

lunes, 29 de agosto de 2011

END sin Aguirre

Eduardo Cruz

Las portadas de El Nuevo Diario no tendrán más el sello que le imprimía su director fundador, Danilo Aguirre Solís, quien desde el viernes pasado por la noche ya no labora para el periódico.

Oficialmente, Aguirre se encuentra de vacaciones porque se realizará chequeos médicos, pero su salida del rotativo ya es definitiva supuestamente debido a presiones de los inversionistas que oxigenaron el periódico recientemente.

Según una fuente del diario, Aguirre se iría en diciembre, pero sus titulares estaban incomodando a los nuevos dueños quienes le habrían pedido que dejara la empresa este mes.

Aunque le orientaron a Aguirre que sus titulares no fueran conflictivos con el gobierno de Daniel Ortega, el editor no hacía caso. Ante esta actitud los nuevos dueños le dijeron que terminara el mes y se fuera. Aguirre respondió que no iba a terminar nada y se fue ayer mismo, explicó la fuente.

Francisco Chamorro, director del periódico, explicó que desde que la empresa dejó de ser familiar se dijo que habría cambios en la Junta Directiva.

Considerado un especialista en la titulación de noticias, Aguirre, de 71 años, fundó El Nuevo Diario el 19 de mayo de 1980, junto a Xavier Chamorro.

PRONUNCIAMIENTO DEL CENTRO NICARAGUENSE DE ESCRITORES ANTE LA DESAPARICION DE “LA PRENSA LITERARIA”


Este sábado pasado, la comunidad de escritores y escritoras detectamos un profundo vacío al no encontrar en el renovado formato del periódico La Prensa, el valioso e histórico suplemento La Prensa Literaria.

Una página diaria, nos han querido explicar, es en lo que se ha convertido nada menos que “la universidad de bolsillo” como la llamó su director-fundador, Pablo Antonio Cuadra. Creemos que incluir una página diaria sobre la cultura del país es una excelente innovación del nuevo formato de La Prensa, siempre y cuando ella no sea concebida como sustituta del suplemento semanal. Una página sola no logra condensar la exuberante producción literaria y artística de nuestro país. Una página sin el suplemento semanal es dispersión y exclusión, un paso en falso que recomendamos corregir a los propietarios del diario.

El Centro Nicaragüense de Escritores demanda a la Junta Directiva y Consejo Asesor de La Prensa, se restituya tan imprescindible suplemento que ha contribuido por tantos años con la educación de nuestra ciudadanía, a la vez que insta a las distintas asociaciones artístico-culturales, a pronunciarse con el legítimo derecho que nos da el ser protagonistas y consumidores de dicha publicación.

Dado en Managua a los veintinueve días del mes de agosto del dos mil once.

Junta Directiva del CNE: Vidaluz Meneses, Manuel Ortega Hegg, Guillermo Cortés Domínguez, Margarita López Miranda, Angela Saballos, Ernesto Castillo Martínez, Ulises Juárez. Presidentes Honorarios: Ernesto Cardenal, Carlos Tünnerman, Luis Rocha

sábado, 27 de agosto de 2011

Danilo deja END pero no la lucha

Sábado, 27 de agosto de 2011, 21:15

Guillermo Cortés Domínguez

Periodista

Casi medio siglo después de escribir su primer titular en el diario La Prensa, Danilo Aguirre Solís elaboró el último anoche en El Nuevo Diario, tras una honorable negociación con los nuevos propietarios de este periódico, mediante la cual sale de vacaciones por dos meses, pero que en realidad marcan su retiro definitivo de lo que él mismo llamó hace un poco más de un año, “el arte de titular”.

“Padre fue estrangulado” es el titulo de ocho columnas –en realidad son seis-- que Danilo elaboró anoche en su amplia oficina de END y que esta mañana se lee en el periódico. Solo unos veinte minutos después recibía un baño de admiración y reconocimiento a su extraordinaria trayectoria profesional signada por la honestidad y la valentía, de parte de unos veintidós colegas, la mayoría jóvenes profesionales, reunidos en una nueva sesión de la “Peña de Periodistas”, un espacio de debate y esparcimiento entre comunicadores sociales.

Parece de hierro este hombre entregado en cuerpo y alma, al periodismo, que con pasión juvenil todavía tecleaba con fuerza sus titulares en una vieja máquina de escribir Olimpia, porque asume con entereza su separación de END, forjado como ha sido en las llamas de las múltiples dificultades que ha enfrentado en su vida, como cuando casado y con dos hijos perdió su primer empleo en el Ferrocarril de Nicaragua, y tuvo que hacer diablos de zacate para sobrevivir con su familia. Luego debió abandonar sus delicadas responsabilidades en el diario La Prensa y su asiento en la Asamblea Nacional.

Son tres lugares, tres empleos, tres sitios muy diferentes, unidos por el hecho de que, pese a que han transcurrido varias décadas, él no ha vuelto a poner un pie en ellos, pero no quiere que pase lo mismo con El Nuevo Diario (END), lo dijo con humildad, lo que revela también que, después de todo, lo ocurrido fue algo cercano a un final feliz. ¿Nostalgia por un proyecto periodístico emprendido junto a Xavier Chamorro Cardenal cuando éste decidió utilizar su patrimonio en La Prensa para irse a fundar un nuevo diario con un grupo de intrépidos trabajadores de ese periódico?

Sus titulares históricos

Pero no crean que no lo afecta esta separación de uno de los grandes amores de su vida, ¿cómo no le va a afectar separarse de su querido nuevo diario que concibió y que ayudó a fundar y en el que ha estado al pie del cañón casi todos los días de las últimas tres décadas, incluyendo casi todos los fines de semana? Pero él sabe que no puede darse el lujo de sentirlo demasiado. Tres "bypases" en el corazón requieren de una voluntad de acero para mantener controlados los nervios alborotados y las intensas emociones. Y Danilo lo logra. Él está clarísimo de cómo administrar el momento especial que está viviendo, muy consciente de lo que deja atrás y, sobre todo, del futuro que se le abre en pampas.

“Mandaron a asesinarlo”, tituló Danilo en La Prensa, tras el magnicidio de su Director, pero, sobre todo, de su colega y amigo, el Dr. Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, que él confesó en una entrevista con el periodista Luis Galeano, que escribió con rabia e indignación. Pero el análisis de este titular estaría incompleto sin el antetítulo desafiante y premonitorio: “Lo enterrados serán ellos”.

A la inédita conmoción de felicidad colectiva que produjo el derrocamiento de la dictadura somocista y el triunfo de la revolución popular sandinista, Danilo Aguirre Solís agregó el devenir, cuando tituló en el primer ejemplar del diario oficial del FSLN, Barricada, “Vencimos y adelante”, solo tres palabras que resumieron con maestría el presente y la perspectiva inmediata. Y en el antetítulo escribió: “Los enterrados fueron ellos”, cerrando el ciclo abierto con su titulación del asesinato de Pedro Joaquín Chamorro. Como afirmó el colega Luis Galeano en la entrevista a Aguirre, “se cumplió la sentencia y la reprodujo la misma mano que la había advertido”.

Contrariando y rebatiendo algunas especulaciones envenenadas, y dando a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César, Danilo reconoció que se llevó muy bien con Francisco Chamorro, de quien no expresó ninguna queja, sino un reconocimiento por la relación de respeto que ambos construyeron y que se mantuvo y se fortaleció hasta el último momento.

Protagonistas de un hecho histórico

Generalmente la personalidad arrasadora de Danilo se apodera de la atmósfera del lugar donde se encuentre, y no hay manera de impedir que todos los ojos se claven en él y los oídos le presten atención, pero anoche fue todavía más intensa esta escena común, porque él estaba siendo protagonista de un hecho histórico y, de alguna manera, también todos los participantes de la Peña de Periodistas.

Y Danilo no se anduvo con cuentos: no era una conferencia de prensa pero respondió todas las preguntas que le hicimos, algunas, lanzadas como curvas endemoniadas, otras, como poderosas rectas de cien millas a la esquina de adentro, donde duele, o como paralizantes ganchos al hígado. Y una a una devolvió todas las pelotas al otro lado de la barda, aunque no fueran bolas pasadas, ni mucho menos.

Las extensas respuestas de Danilo, de una lógica implacable y demoledora, estaban cargadas de historia, con alusiones a situaciones de varios países de América Latina y a diferentes momentos cruciales de la inconstante vida política de Nicaragua. Los jóvenes y los menos jóvenes no podíamos evitar admirarlo, pues tiene tanto en su cabeza, producto no solo de su intenso protagonismo político y vivencia periodística, sino también de sus incontables horas de lectura comprensiva, que tanta falta hace actualmente.

¿Por qué los nuevos dueños de END separan del diario a su pilar periodístico fundamental y porqué Aguirre acepta un arreglo que propicia su salida? Danilo ya ha percibido en las últimas semanas que él no encaja en el proyecto periodístico que pretenden los accionistas encabezados por el principal propietario del Banpro, Ramiro Ortiz Mayorga, porque éstos quieren un diario menos combativo, y él se caracteriza precisamente por su posición frontal y sin vacilaciones frente a toda injusticia, la corrupción, la violación de las leyes, lo cual implica que con incómoda frecuencia sus titulares sean como cañones disparando verdades que resiente el gobierno. Pedirle que “bajara el gas” habría sido una provocación, una verdadera locura. No se atrevieron.

Evitó separación traumática

Pudo haber sido una separación tremenda y traumática. Hace apenas unos meses hubo una conmoción nacional cuando se abrió la posibilidad de que END fuera adquirido por la familia Ortega-Murillo, lo cual redujo de modo sustancial la circulación de este periódico y afectó con fuerza el estado de ánimo de su valioso colectivo de periodistas. La venta de periódicos se ha recuperado, y ahora tienen más anuncios, sobre todo de las compañías relacionadas con el capital financiero que controla al Banpro.

Siendo Danilo Aguirre una personalidad tan recia, casi un símbolo del periodismo nacional, un referente de valores en el mundo de la comunicación social y de la política, una confrontación habría perjudicado con severidad al diario de sus sueños. Así que anoche mismo conversaron y se arreglaron, después que le ofrecieran una salida por la puerta grande, con gran homenaje y todo, pero declinó, y su partida no contó con un titular en primera plana, tampoco en la contraportada o en las páginas editoriales. Solo se fue.

Pero Danilo Aguirre Solís no se puede ir solo a tomar un baño de sol y un trago de whiskey, porque eso le está vedado a quien está obligado a descargar tanta historia crucial y aleccionadora almacenada en su formidable disco duro; y, por supuesto, tendrá más grados de libertad para entregarse con alma, vida y corazón a la resistencia contra todas las manifestaciones autoritarias que están tejiendo una dictadura en Nicaragua. Dictadura sin prisioneros políticos, sin torturas físicas en angostos y oscuros calabozos y sin asesinatos. Pero dictadura al fin. Mientras tanto, este domingo disfrutará de la celebración de los cincuenta años de su hijo Érick.

No soy buen titulador, pero ante este hecho impactante y trascendente, histórico en el periodismo nacional y la política, en la primera plana de un diario habría titulado: “Danilo deja END pero no la lucha”. ¿Cómo me quedó, Danilo?

viernes, 26 de agosto de 2011

Atraccion Fatal

Los aficionados al cine difícilmente podemos olvidar la película cuyo título lleva este escrito. La atracción animal y a la postre fatal que la diva del cine de la década de los noventas del siglo pasado, Glenn Close, sentía por el súper astro hijo de tigre, Michael Douglas, hacen de ATRACCION FATAL, un clásico del cine del suspenso.

La atracción fatal que existe por Roberto Rivas de parte del Presidente de la República, quizás no gane el Oscar de la Academia Cinematográfica de Hollywood, pero sobre pasa el afecto que un presidente pueda sentir por un funcionario de su gobierno. Lo que vemos a diario referente a los abusos, escándalos, aberraciones en contra de la Constitución y derroches ofensivos para con el pueblo nicaragüense cometidos por el presidente de facto del CSE, con una total impunidad, merece otro nombre que aun no se ha definido con precisión.

Lo que sí está bien definido son las consecuencias de esa tolerancia sin nombre de parte de las autoridades del país para con el todo poderoso administrador de la voluntad electoral del pueblo. Una persona que está siendo cuestionada porque no quiere pagar lo que debe y no quiere entregar el objeto que compró, no es la mejor escogencia para encabezar el organismo encargado de adjudicar los votos de los nicaragüenses en la casilla correcta, sobre todo cuando ya existen evidencias de su mal comportamiento en elecciones pasadas, como es el ocho y medio por ciento aun no contabilizado y el flagrante fraude a favor del orteguismo en las elecciones municipales de 2008.

Por simple lógica, por natural instinto, los nicaragüenses pensamos que esa atracción del Presidente de la República por el Presidente de facto del CSE, tiene raíces profundas que son solo del conocimiento de los cófrades de Chontales y por supuesto del señor del burrito de Kentucky.

Pero las atracciones fatales que provoca Roberto Rivas Reyes, invaden otros terrenos, esta vez el de la CSJ, a cuya Presidenta no le tembló la voz ni se le alteró el pulso cuando llamó “francotiradores y emboscadores por encargo”, algo así como SICARIOS de una banda de criminales, a los periodistas de Nicaragua, solo porque estos, en el cumplimiento de sus labores informativas, le hacen preguntas que no pueden tener respuestas e incomodan a la señora presidenta del organismo encargado de repartir justicia. Los epítetos duros e inapropiados contra los periodistas, tuvieron su origen en la defensa ardorosa de la presidenta de la CSJ, de un sujeto que por lo cuestionado, bien se le puede calificar de inmoral.

Con una Presidenta de la CSJ como la Dra. Alba Luz Ramos Vanegas, es muy difícil esperar que la justicia sea administrada con absoluta transparencia e imparcialidad.

Todo eso contribuye a la pérdida de la institucionalidad en el país, porque las instituciones estatales están plagadas de personas que no responden al bien común por responder a los intereses personales de un Poder Ejecutivo dictatorial y absolutista, a cambio de prebendas de todo tipo.

Magistrados de la CSJ que no imparten justicia; magistrados del CSE que no administran los votos con transparencia; Legisladores que hacen de la AN un mercado de conciencias y votos; contralores que investigan solo lo que les ordenan de la Secretaría General del orteguismo, siempre a favor del poderoso señor del Ejecutivo y un Fiscal General de la República que tiene un pacto de silencio con el jefe máximo, por lo que nunca sabe nada de nada, son los responsables que Nicaragua se presente ante el mundo como una vasta porción de tierra dominada por un señor feudal con derecho de pernada, que avasalla a los ciudadanos y promueve la corrupción institucional.

Esa es la Nicaragua de hoy: SOMETIDA POR UN SISTEMA CORRUPTO Y CONTINUISTA. Pedro Joaquín, tu soñada República sigue sumida en las tinieblas de la dictadura. Inspíranos con tu ejemplo para poder encontrar la luz de la libertad.

Jorge J Cuadra V

jueves, 25 de agosto de 2011

En Letra Pequeña

Por: Fabián Medina


EFECTO DOMINÓ

En noviembre de 1989, cae el muro de Berlín y tres meses después Daniel Ortega pierde unas elecciones que tenía ganadas. El 11 de septiembre del 2001 caen las torres gemelas y Estados Unidos enseña los dientes con aquella infortunada frase de George W. Bush: “Quien no está con nosotros está contra nosotros”. Dos meses después Daniel Ortega pierde unas elecciones que también tenía aparentemente ganadas. En agosto del 2011, Daniel Ortega parece ganador seguro nuevamente y ¡plas! cae Gadafi en Libia ¿Podría perder otra vez? Digo, para no perder la costumbre.

BALA PERDIDA

Obviamente no hay comparación entre la caída del bloque socialista, la virulenta reacción de Estados Unidos cuando atacaron a sus ciudades y la caída de un dictador de Medio Oriente. Pero hay al menos dos razones que convierten a Gadafi en una bala perdida contra Ortega. Primero, es su amigo personal, y segundo, la caída de Gadafi puede ser apenas un hecho más de un proceso de cambios que nunca sabemos dónde terminarán ¿Acaso se vislumbraron las consecuencias que tendría la llegada de los primero alemanes a las cercanías del muro aquella noche de 9 de noviembre de 1989?

LA MESADA

Fue en noviembre de 1998, en una entrevista que le hice a Daniel Ortega para el desaparecido El Semanario, cuando el líder sandinista reveló que recibía una mesada del coronel libio Muamar el Gadafi. Yo le pregunté sobre sus fuentes de ingresos, porque no se le conocía negocio u oficio alguno, y la pensión de expresidente sería insuficiente para el gasto que implica la vida de su familia en el complejo habitacional donde residen. “El coronel Gadafi ha sido un soporte muy importante todos estos años”, me dijo. ¿Personal o del partido?, insistí. “En carácter personal”.

AMOR CON AMOR SE PAGA

No hay favores gratis. Y todo lo que haga Daniel Ortega, para bien o para mal, está ligado a la suerte de Nicaragua. Entonces, la gran pregunta es ¿cuánto nos costará la mesada que durante tantos años recibió Ortega de Gadafi? ¿Pagará los favores recibidos o se hará de la vista gorda ahora que el amigote está en desgracia?

PARADOJA

Hay que decirlo claramente: el CSE se ha convertido en el principal obstáculo del voto libre y transparente en Nicaragua. No solo ha dejado de promover el voto, como le corresponde por función, sino que hace todo lo posible, todos los días, para que los nicaragüenses sintamos que no tiene ningún sentido votar. ¿Habrá en el mundo otro tribunal electoral así como este?

OBSERVADORES A LA CARTA

¿Volverán los “observadores” del CEELA para estas elecciones? ¿Se acuerdan ellos? Fueron creados por el presidente Hugo Chávez, vinieron pocos días antes de las votaciones de noviembre 2008, el presidente Ortega los calificó de “observación idónea” y ellos avalaban todo lo que le ponían adelante. “Los nicaragüenses pueden ir a las urnas sabiendo que no se va a dar ningún problema”, afirmó su presidente Nicanor Moscoso un día antes de las votaciones. Era la observación soñada. Pero el fraude del 2008 fue tan descarado y descomunal que ni estos señores pudieron avalar sus resultados y el mismo Consejo Electoral que los trajo, nunca quiso hacer público el informe final que ellos hicieron. El descaro, de ellos al menos, no llegaba a tanto.

Una burla a los Observadores

Carlos F. Chamorro

El reglamento del llamado “acompañamiento electoral” que presentó el Consejo Supremo Electoral, representa una conculcación de los derechos de observación electoral que están establecidos en la misma ley electoral y que se han practicado en nuestro país desde 1996. Para empezar, el “acompañamiento” carece de sustento en la legislación nacional y su articulado contradice los compromisos internacionales sobre la observación electoral, establecidos por Naciones Unidas y asumidos por el Estado de Nicaragua.

Ese reglamento tardío se burla de los ciudadanos y las organizaciones de observación electoral, pero también es una burla a la Conferencia Episcopal y a los empresarios del Cosep que de buena fe le otorgaron el beneficio de la duda al gobierno del presidente Ortega, para que rectificara con la prohibición de la observación electoral.

La reacción ha sido una lluvia de críticas nacionales e internacionales sólidamente fundamentadas, porque ninguna organización independiente parece estar dispuesta a someterse a un reglamento que no define los derechos de los observadores, como su presencia en las Juntas Receptoras de Votos y los Centros de Cómputos, y más bien les pretende imponer hasta rutas de observación.

En consecuencia, el presidente Ortega se vio obligado al viernes a decir en cadena nacional de radio y televisión que no habrá ninguna restricción para los observadores electorales. Escuchamos a un Presidente, que también es candidato presidencial y a la vez jefe supremo del Consejo Electoral, o sea el “jefe máximo” del que le cuenta los votos, en un inútil esfuerzo por adoptar la pose de estadista. Colocándose siempre por encima de la ley y alardeando de su poder discrecional, Ortega proclamó que no expulsará a los observadores internacional “aunque vengan a pegar cuatro gritos”, y de paso se burló de la observación electoral. De la misma forma, Roberto Rivas, el presidente de facto del Consejo, prometió a dos altos funcionarios del Congreso norteamericano que no se limitarán los derechos de los observadores, aunque se reservó el derecho de “vetar” a las voces más críticas de las organizaciones de observación electoral.

Pero ¿quién le cree a la palabra del candidato Ortega, que ha sido el primero en violar las leyes y la constitución, o peor aún, quién le cree a su subordinado Roberto Rivas, que representa un verdadero monumento al cinismo oficial? Si Ortega de verdad quiere restablecer la credibilidad sobre la observación electoral, que es lo único que le puede otorgar alguna de legitimidad a los resultados de estas elecciones, bastaría con que le ordene al Consejo Supremo Electoral anular ese reglamento de “acompañamiento”, y que mande publicar un reglamento de observación igual al que prevalecía en las elecciones anteriores. Basta una orden del jefe supremo de Roberto Rivas, para que se acabe toda esta farsa. ¿Tiene acaso algún impedimento Ortega para rectificar a Roberto Rivas? ¿Hasta donde llega su compromiso con este personaje que está señalado no solo de fraude electoral probado, sino además de presunción de fraude al estado y enriquecimiento ilícito? Todo indica que entre ambos existe un compromiso incondicional, que está directamente subordinado a la alianza política que mantiene Ortega con el cardenal Obando.

A final de cuentas, Ortega impuso a Rivas contra viento y marea, pero ahora éste se ha convertido en el principal lastre de la credibilidad del proceso electoral. Está cayendo en su propia trampa y ya es demasiado tarde para salirse del hoyo.